Ciudad de México.- Tras la votación del 7 de junio, llegó la hora de contar los votos y detectar quién hizo trampa.
La responsabilidad la cargan en sus hombros los nuevos magistrados del Tribunal Electoral del Distrito Federal (TEDF).
“No nos temblará la mano para ejercer castigos a quienes hayan cometido irregularidades… siempre y cuando los denunciantes puedan probarlo”, asegura a Capital MX, el presidente del TEDF, Armando Hernández Cruz.
A los partidos y aspirantes perdedores ya les corrió el plazo para inconformarse y se espera que sea una de las elecciones con mayor número de impugnaciones. Hernández prevé resolver antes del 17 de agosto en caso de los diputados y del 1 de septiembre para delegados, ya que esas son las fechas de toma de protesta.
A su juicio, no es sorpresa el cúmulo de impugnaciones debido a que en la capital hubo tres elecciones: la de diputados de mayoría, la de diputados de representación proporcional y la de jefes delegacionales.
Todas se enfrentaron a las características de esta jornada: diez partidos políticos nacionales compitiendo, candidatos independientes y nuevas reglas gracias a la reforma constitucional 2014, además de una nueva distritación.
“La calificación de la elección es lo que nos toca a nosotros y eso implica darle certeza final al proceso”, dice sentado en su despacho donde ya recibe las primeras impugnaciones.
El magistrado prefiere no especular sobre un probable fraude y asegura que esperará a conocer los casos concretos y su sustento jurídico.
«Nosotros no hacemos especulación, cuando nos llegan los medios de impugnación se atienden y se resuelven de acuerdo a lo que se establece la ley».
-¿En que fallan los partidos políticos al impugnar?
“En el derecho electoral procesal una de las principales complicaciones son los medios de prueba, es decir, el poder acreditar con certeza la denuncia; por ejemplo, si un escrito de impugnación viene acompañado de fotos de una persona entregando una despensa, eso no acredita las circunstancias de modo, tiempo y lugar. Sé que nos echan la culpa y dicen que el Tribunal ‘apapacha’ y no es así, se ha sancionado a candidatos y partidos pero tiene que ver mucho como se generan los medios de impugnación”.
-¿Observó un proceso limpio y democrático en la campaña?
“El calificativo de limpio y democrático son muy subjetivos. Yo diría que el Tribunal atendió todas las quejas e impugnaciones que se presentaron y esto desde mi punto de vista ayudó a darle legalidad y certeza al proceso».
-¿Les temblará la mano para anular alguna elección con irregularidades?
“Yo creo que el Tribunal está listo a toda su capacidad para atender todas las impugnaciones que lleguen y no hay ningún motivo para pensar que no se atiende debidamente conforme a derecho y creo que al final el resultado será que este Tribunal será bien evaluado por la sociedad».
-¿Se subordinarán ante el Gobierno capitalino?
“Evidentemente tenemos una buena relación con las autoridades locales y con el Instituto Electoral; este Tribunal ha tenido la fortuna de contar con muy buena relación e incluso en términos personales con los consejeros, entonces hemos caminado de la mano, trabajado juntos y tomado decisiones de manera coordinada para llevar mejor el proceso electoral».
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