Ciudad de México.- ¿Cuál será el sentir de las y los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador los señala como parte de la corrupción?
En los próximos días tendrán que discutir y decidir sobre la ampliación del mandato, hasta 2024, del ministro presidente Arturo Zaldívar, la cual aprobaron las mayorías parlamentarias de Morena en las Cámaras de Diputados y Senadores.
Sobre las y los ministros ya cayó el filo de la espada de Palacio Nacional: Si no aprueban que Zaldívar se quede dos años más al frente de la Corte, serán cómplices de la corrupción del antiguo régimen, dice López Obrador.
Las y los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ya les pusieron el ejemplo y demostraron que pueden hacer valer la división de poderes a pesar de las presiones presidenciales.
El Tribunal Electoral cumplió la ley y canceló las candidaturas a gobernadores de los morenistas Félix Salgado Macedonio y Raúl Morón, quienes no comprobaron sus gastos de precampaña como establece la legislación.
También aprobaron el acuerdo del INE para evitar la sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados, trampa utilizada por Morena en 2018 para tener un 15.7 por ciento de diputados más de los que el electorado les otorgó.
Ahora corresponderá a las y los ministros de la Corte demostrar independencia y decidir con apego a la Constitución, lejos de los intereses de Palacio Nacional e, incluso, del propio ministro presidente.
Zaldívar se tendrá que excusar de participar en la discusión, porque no puede ser juez y parte.
Las y los ministros pondrán en juego el prestigio propio, pero sobre todo el del Poder Judicial en su conjunto. Es obvio que desde el gobierno buscan persuadirlos para votar a favor de la ampliación de mandato, porque así lo quiere López Obrador.
El Tribunal, a pesar de saber la turbulencia que le viene por sus decisiones, dejó en claro que no se dejó presionar ni manipular.
La Corte tendrá la oportunidad de dejar de ser vista como un apéndice del presidente de la República.
¿Se atreverán?
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