Ciudad de México.- El sismo del 19 de septiembre no sólo obliga a la Asamblea Legislativa del DF (ALDF) a modificar las fechas para la discusión y aprobación del Programa General de Desarrollo Urbano (PGDU), sino también su contenido, expuso la diputada del PAN y presidenta de la Comisión de Desarrollo Urbano del órgano legislativo, Margarita Martínez Fisher.
“Estamos conscientes en la ALDF que la agenda en materia de desarrollo urbano cambia los términos del debate para priorizar la seguridad humana y enfoquemos los apoyos y reformas en ese sentido”, manifestó la legisladora.
Agregó que el proceso de desarrollo urbano debe centrarse también en la supervisión de las obras que se realizan en la Ciudad, así como en el trabajo que desarrollan los directores responsables de obra y corresponsables en seguridad estructural.
“La mayoría de los expertos coinciden que no hubo un problema con la normatividad en sí o con la forma con la que está diseñado el Reglamento de Construcciones, sino que tiene que ver con la supervisión.
Una prioridad será esa, analizar las bitácoras constructivas, ver qué se necesita reforzar en la supervisión de obras y cómo funcionará la responsabilidad que tienen los directores responsables de obra y los corresponsables de seguridad estructural y que podamos dar certeza a ciudadanos”, dijo Martínez Fisher.
Entrevistada en el Pleno de la ALDF, la diputada del PAN dijo que se debe obligar a los desarrolladores inmobiliarios a hacerse responsables, no como personas morales sino de forma individual, de los vicios ocultos que aparezcan en las construcciones.
Dijo también que la normatividad debe considerar un nuevo tipo de zonificación, para que además de las que ya existen, como la habitacional o comercial, exista una zonificación sísmica y los potenciales constructivos se apeguen a esa condición.
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