¡Saludos Ciudad de México!
Nos hemos enterado que…
El adversario más duro que ha enfrentado Morena al interior de la Asamblea Constituyente se llama protagonismo.
Ese protagonismo rebasó los límites de tolerancia del diputado Mardonio Carballo, cuota indígena de Morena, para la redacción de la primera Constitución de la Ciudad de México.
Para sorpresa de muchos, la primera que impuso su ego en las filas de Morena fue la reconocida antropóloga Consuelo Sánchez, quien nunca aceptó que Carballo fuera el presidente de la Comisión de Pueblos Indígenas de la Asamblea Constituyente.
La segunda mujer poseída por el protagonismo fue Patricia Ruiz Anchondo, leal a Martí Batres, líder de Morena en la CdMx.
A ambas, se les vio gritarle en público a Carballo, quien al retirarse del Constituyente no dijo nombres pero acusó discriminación.
Al interior de Morena hay molestia por que Sánchez y Ruiz Anchondo no tuvieron respeto por el representante indígena.
Ambas cuestionaron su dictamen, donde estaba fuera la idea de Sánchez de crear "zonas autónomas" estilo zapatista.
El fin de semana pasado, al llegar el plazo para tener listos los dictámenes vino la gota que derramó el vaso.
Ruíz Anchondo citó una reunión para ver el tema de la consulta, pero Carballo no fue invitado.
Así, por esos protagonismos y soberbia, Morena sepultó uno de los principales temas de su agenda en la Asamblea Constituyente.
A veces, el enemigo está en casa.
Una de mil…
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