Las iglesias en México se han caracterizado por su labor social, por ello refuerzan programas sociales ante la pandemia.
Ante la crisis que se vive por Covid-19 algunas de éstas han redoblado sus esfuerzos para apoyar a las comunidades a través de programas de alimentos e insumos médicos.
Este potencial el gobierno de la 4T quiere aprovechar para desarrollar sus proyectos.
Una de estas iglesias es la de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones).
En agosto pasado donó siete millones de pesos a la organización de la iglesia católica Cáritas Mexicana para distribuir 38,500 despensas en todo el país.
Se benefició a 142 mil personas.
En septiembre a través de la organización Project HOPE entregó cerca de cuatro toneladas de insumos de protección.
Se repartieron googles médicos, batas y guantes al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), los cuales se distribuyeron en hospitales del país.
Así se protegió a quienes estaban en la primera línea de batalla contra Covid-19, lo que representó una inversión de 6 millones 172 mil pesos.
Para noviembre del 2020 realizó un donativo de 1,000 despensas a familias de Yucatán afectadas por los estragos naturales y fueron repartidas a través del DIF.
Además, en octubre donó 100 camas sillas al hospital del IMSS en esa entidad.
En marzo de este año donó cerca de 330 mil kilos de alimentos con un valor de 7 millones 500 mil pesos al Banco de Alimentos de México, que tiene 55 centros en el país.
Con ello beneficiaron a 660 personas vulnerables por la pandemia en el México.
Iglesias refuerzan programas sociales
Con la pérdida de millones de empleos a causa de la pandemia, la Iglesia ofrece al público en general desde abril capacitación gratuita a emprendedores y clases de inglés.
Así como centros de mentoría y aprendizaje en diseño gráfico para negocios, empresas virtuales certificación de ventas y servicios al cliente.
La semana pasada la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones) lanzó en México la plataforma “Sirve Ahora”.
A través de la plataforma contacta a voluntarios para apoyar causas y tiene como propósito impulsar el mejoramiento del entorno social, cultural y económico del país.
Esta plataforma a nivel mundial ha generado más de 118 mil planes de mejora de la sociedad en varios países, en proyectos de ayuda humanitaria, lucha contra el hambruna.
También trabajan en el impulso a emprendedores, apoyos en la salud y prevención de la violencia, entre otras causas.
Una de sus primeras alianzas es con el Banco de Alimentos de México (BAMX) que atiende actualmente un millón 900 mil familias en todo el país.
Y con el apoyo del voluntariado de “Sirve Ahora” se planea llegar a más familias y comunidades en situaciones precarias.
Esta es la labor de una iglesia que en el país tiene, según sus datos oficiales tan sólo cerca de un millón 500 fieles.
Su presencia abarca las principales ciudades del país como Monterrey, Guadalajara y Ciudad de México.
Desde el 2019 el Reglamento Interior de la Secretaría de Gobernación se modificó para aprovechar la estructura de las asociaciones religiosas.
Las Iglesia refuerzan programas sociales ante la pandemia y se hizo en beneficio de los proyectos de la 4T.
Es importante que Héctor Humberto Miranda Anzá, titular de la Unidad de Asuntos Religiosos, Prevención y la Reconstrucción del Tejido Social, creador de ese proyecto, transparente el trabajo que realiza con las asociaciones religiosas.
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