Ciudad de México.- En un juego de ajedrez se ha convertido el proceso contra el gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca. Ahora un juez federal en Tamaulipas otorgó una suspensión provisional para que el mandatario estatal no pueda ser detenido.
De esta manera, la Fiscalía General de la República (FGR) está impedida para ejecutar la orden de aprehensión por los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El juez Octavo de Distrito, Faustino Gutiérrez Pérez, argumentó que debe revisarse si el gobernador tamaulipeco cuenta o no con fuero, porque eso todavía está pendiente de resolución.
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Parece que Cabeza de Vaca no será el trofeo que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anhelaba antes de las elecciones del 6 de junio. El Presidente lo quería detenido para presumir su lucha anticorrupción e intentar recuperar algunos puntos que su partido, Morena, ha perdido en las encuestas.
Sin embargo, con un gobierno que no atiende la Constitución ni las leyes, es probable que el mandatario mexicano se saque otro as de la manga en los próximos días para intentar reposicionar a su partido.
Lo que menos importa en estos momentos en Palacio Nacional es violar la legislación electoral. El interés está en ganar la mayoría en la Cámara de Diputados y hasta el último día el Presidente buscará descalificar a sus adversarios para capitalizarlo a favor de su partido.
A López Obrador, sentado de un lado del tablero y con todo el poder que concentra, se le está complicando meter a la cárcel a Cabeza de Vaca antes del 6 de junio. Los abogados de este, encabezados por Alonso Aguilar Zínzer, utilizan todos los recursos legales para evitar que su defendido vaya a prisión.
Todavía le faltan muchos movimientos a esta partida de ajedrez. Cada jugador continuará moviendo sus piezas como mejor le convenga política y jurídicamente. El juego no terminará antes del 6 de junio. El Presidente es obsesivo y no cejará en su intención de ver en la cárcel a su adversario.
En tanto, Cabeza de Vaca y su equipo jurídico seguirán buscando que no les hagan jaque mate.
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