Ciudad de México.- En el arranque de las campañas en la capital de México se ha percibido un clima de civilidad debido a que, aparentemente, el Gobierno de la Ciudad de México (CDMX), que dirige Claudia Sheinbaum, se ha mantenido al margen.
Sin embargo, Sheinbaum ha cometido el error de actuar con tibieza en su facultad de autoridad sanitaria para poner lineamientos claros que ayuden a reducir contagios en la pandemia que arrecia en la CDMX, en la víspera de la tercera ola de Covid-19.
Confiemos en que los candidatos serán responsables y en caso de contagiarse del virus lo harán público y se aislarán para no ser factores de contagio, de lo contrario la ola será expansiva y Sheinbaum llegará una vez más de forma reactiva al problema.
Hoy volvió a cometer un error grave al imitar a su jefe político Andrés Manuel López Obrador y violar la veda para defender a su compañero de partido Félix Salgado Macedonio.
En el pecado llevan la penitencia. Ignorantes de las leyes, por creer que la ley son ellos, pasan por encima de la legislación secundaria y de la Constitución. Como en cualquier dictadura el régimen son los que ostentan el poder.
El origen del conflicto de Salgado Macedonio es el mismo partido de Morena que hizo un proceso interno sucio, viciado, en el que hay candidatos que a horas del cierre del registro se enteraron que eran candidatos y hoy hablan de penas desproporcionadas.
Se saben violadores de la ley pero exigen la pena mínima con descaro y en los hechos cuando ellos hacen uso de la justicia actúan de forma desproporcionada.
Morena y la Jefa de Gobierno si quieren abonar a una transformación real del país deben empezar por instaurar el Estado de Derecho. Sin respeto a la legalidad nunca habrá justicia ni justicia social.
Sheinbaum tiene la gran oportunidad de distinguirse en la consolidación del Estado de Derecho, aunque ello pasa porque sea promotora de la legalidad, de lo contrario se seguirá tropezando con sus palabras por no respetar la ley.
NOCAUT. En Morena están no solo divididos sino también peleados con sus aliados del PT y del PVEM. Sus campañas coaligadas corren por separado y como ya se vio en Gustavo A. Madero se agarran hasta a golpes entre ellos. Que no les sorprenda un resultado adverso el 6 de junio. ¡Abrazos, no periodicazos!
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