De enero a abril de este año, Petróleos Mexicanos (Pemex) mantuvo un saldo positivo en su balanza comercial, al promediar 871 millones de dólares, lo que suma cuatro meses consecutivos en terreno favorable.
La balanza comercial petrolera, que refleja la diferencia entre exportaciones e importaciones de productos petroleros, muestra un saldo positivo del 4.8%. Según los datos de Pemex, las compras de hidrocarburos y sus derivados en el extranjero durante los primeros cuatro meses del año alcanzaron un total de 8,408 millones de dólares.
En el mismo periodo, el volumen de las exportaciones de crudo de Pemex ascendió a aproximadamente 9,279 millones de dólares. Estos datos reflejan una reducción en las importaciones de petroquímicos, alineada con la política de la administración actual de reducir la dependencia de combustibles importados para alcanzar la autosuficiencia energética.
La política energética emprendida desde el inicio de la administración tiene como objetivo producir lo suficiente para abastecer la demanda interna, lo que se espera resultará en un saldo positivo continuo, donde los energéticos consumidos sean producidos en el país. Con estos resultados, se anticipa que la balanza comercial de Pemex cerrará el año en números positivos, con importaciones menores a las exportaciones.
Acumula Pemex balanza comercial positiva por cuatro meses consecutivos
El director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, destacó recientemente que para el final del sexenio se dejarán de importar gasolinas. “Todo el aceite que producimos se va a refinar, ya no va a haber necesidad de comprar gasolinas al extranjero para finales de esta administración y principios de la otra”.
La información de Pemex también indica una tendencia a la baja en la importación de combustibles en los últimos años. Esta tendencia continuará con el aumento en la producción del Sistema Nacional de Refinación (SNR) y con la entrada en operación de la Refinería Olmeca.
Las proyecciones de Pemex sugieren que con el inicio de operaciones de Dos Bocas y la incorporación de las dos plantas coquizadoras en construcción, la importación de gasolinas en el país podría reducirse a un 5.8%. Esta estrategia permitirá a México avanzar hacia la autosuficiencia energética y reducir su dependencia de combustibles importados.
Estos avances reflejan los esfuerzos de la actual administración para fortalecer la industria petrolera nacional y asegurar un suministro energético más autosuficiente y sostenible para el país. Con estas políticas en marcha, Pemex busca consolidar su posición en el mercado internacional y contribuir al desarrollo económico de México.
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