Ciudad de México.- No es un secreto que México una vez que consigue un título, lucha con garras y dientes para defenderlo, por lo que la visita de Morrissey al país, ha sido el pretexto perfecto para defender nuestro título como el país surrealista, por excelencia.
Desde el día de ayer, corrió como pólvora la noticia de una aparición especial, del compositor y cantante británico, en un programa matutino de revista, por lo que, a través de las redes sociales de la emisión matutina, se pidió a los seguidores de Morrisey que enviaran preguntas para su ídolo.
Con mucha incredulidad los fanáticos enviaron sus cuestionamientos, debido al hecho de que un artista, cuyos principios se basan en el hartazgo ante una sociedad vacía, asquerosamente básica y vulgarmente común, pudiera hacer acto de presencia en un programa, cuyo principal objetivo es "la buena vibra". Sin embargo, en un sincero acto de fe sintonizaron el canal para atestiguar el histórico acontecimiento, que Morrissey inauguraría con su interpretación de Jacky’s Only Happy When She’s Up on the Stage, a través de un muy conmovedor playback.
Aunque, no todo estaba perdido, ya que su cuerpo de baile ayudó a volver memorable la presentación, con el ritmo que sería la envidia de cualquier fiambre agusanado. Mal y de malas transcurrió la meteórica presentación del artista británico, ya que, no hubo entrevista, ni semblanza de su trayectoria. Aunque, fuentes extraoficiales manifestaron que los conductores tenían prohibido realizar cualquier acercamiento con Morrissey.
