Analizan citar a comparecer al Fiscal Gertz en el Senado de la República, tras la difusión de presuntos audios que lo involucran.
El presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal afirmó que en el caso del Alejandro Gertz, el Senado actuará con mucha rectitud y seriedad.
Agregó que sin prejuzgar ni ahondar en ningún prejuicio, pues “no queremos convertirnos en comparsa de nadie, pero tampoco en Torquemada de nadie”.
Adelantó que este martes se reunirá la Junta de Coordinación Política, para determinar si se convoca a comparecer al titular de la FGR.
En conferencia de prensa, el senador también condenó que persistan en nuestro país el espionaje ilícito y las viejas prácticas de intervenir ilegalmente.
Analizan citar a comparecer al Fiscal Gertz
“Mañana nos reuniremos en la Junta de Coordinación Política, he hablado ya con algunos de los integrantes, para tomar una definición sobre este caso.
«Y por supuesto, que sigue abierta la posibilidad de citarlo a comparecer”.
“Pero no queremos prejuzgar, no queremos ahondar en ningún prejuicio ni violación, hasta en tanto tengamos debidamente conocimiento de todo lo que ha sucedido.
«No vamos a convertirnos en comparsa de nadie, pero tampoco en Torquemada de nadie”.
Monreal Ávila dijo que también hay que esperar a que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resuelva sobre el caso.
Manifestó su confianza por los ministros, “los conozco y no se dejan presionar”.
Explicó que, de acuerdo con la Constitución y la ley, el Fiscal General de la República sólo puede ser removido por el titular del Ejecutivo Federal.
Siempre y cuando incurra en algunas causas graves contempladas en la Ley General de Responsabilidades Administrativas.
O por la comisión de uno o más delitos que ameriten prisión preventiva oficiosa, en términos del artículo 19 constitucional.
Agregó que de acuerdo con la legislación, el Presidente tiene que acreditar ante el Senado la causa que motive la remoción o la separación del Fiscal.
Mientras que el Senado decidirá si objeta o no la remoción, por la mayoría de los miembros presentes en la Cámara de Senadores.
Ello, en un plazo que no exceda los 10 días hábiles.
El senador reconoció que las instituciones se debilitan cuando la ciudadanía pone en duda su imparcialidad y autonomía.
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