La verdadera simulación

Ciudad de México.- A una semana del Día Internacional de la Mujer, el movimiento feminista ha sido calificado por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, como una “simulación”.

Para el inquilino de Palacio Nacional las agresiones, violaciones y asesinatos de mujeres son eso, una simulación, y una campaña para atacar a su gobierno. La visión machista con que se maneja el país es verdaderamente indignante.

En poco más de dos años, este gobierno destruyó lo poco que se había avanzado para la protección de las mujeres: estancias infantiles, guarderías de tiempo completo, refugios para mujeres maltratadas. 

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Mujeres de diferentes signos políticos y sociales lucharon para lograr la protección de quienes son maltratadas. Pero López Obrador desapareció todo para utilizar los recursos en programas clientelares y electorales.

El Presidente presume que en su gobierno hay muchas mujeres en altos cargos. Es correcto, pero de qué sirve eso si no tienen voz ni voto. Obedecen ciegamente las instrucciones de Palacio Nacional, aunque vayan en contra de sus principios.

La verdadera simulación es la del gobierno actual y la del presidente López Obrador, quien ve a las mujeres que no le aplauden como “adversarias”, y a los movimientos feministas como infiltrados por la “derecha”.

El tema de las mujeres se ha convertido en un conflicto para el tabasqueño, quien en su machismo cierra las puertas a un país libre de violencia contra las mujeres.

López Obrador puede liberar a Ovidio Guzmán, saludar a la mamá del “Chapo” Guzmán y defender a un presunto violador como Félix Salgado Macedonio, pero menosprecia, con insultos y calumnias, a un movimiento que lucha, literalmente, por sus vidas.

En sus conferencias matutinas, el Presidente altera la causa feminista y la ataca solo porque exigen acabar con la violencia de género, esa que también se da desde el púlpito presidencial y que abraza la candidatura de un hombre cuyo destino debería ser la cárcel.

Que el Presidente no nos engañe, no es humanista, aunque presuma serlo. Es un macho que cuando no pude lidiar con un problema crea otro para distraer la atención.

¿Qué hará el próximo 8 de marzo?

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