Ciudad de México.- Con presencia de policías y protestas vecinales, el gobierno del Distrito Federal (GDF) intensificó el jueves 3 de septiembre la construcción del doble túnel de Mixcoac a Insurgentes, en la zona de la delegación Benito Juárez.
Acompañados de diputados locales electos de Morena -cuyo distrito corresponde a otra delegación-, vecinos acusaron que hubo un desalojo violento del campamento que mantenían en la zona para impedir la reanudación de los trabajos que ya había anunciado la administración de Mancera.
En la madrugada llegaron los granaderos y se instalaron en los alrededores del camellón.
El GDF aseguró que la decisión se tomó luego de un amplio ejercicio de diálogo con los vecinos y reiteró que es una obra necesario y el jefe de gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, ha pedido que no se politice la protesta vecinal.
La obra ya causó provocó división de opiniones entre vecinos.
Ese día, los diputados locales electos de Morena pidieron la desaparición del cuerpo de granaderos al haber sido empleados para imponer la obra.
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