Ciudad de México.- Por decreto presidencial, el morenista Félix Salgado Macedonio será candidato y muy probablemente gobernador de Guerrero. Una vez más el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, salió a defenderlo y a señalar que se trata de un “linchamiento político”.
Dijo que no es el “gran elector”, pero ya eligió a un presunto violador, pasando por encima de muchas mujeres, incluidas legisladoras de Morena, que le han pedido a Salgado Macedonio renunciar a la candidatura.
El Presidente rechazó que haya denuncias penales contra el senador con licencia: “No hay”, respondió a pregunta expresa, y añadió que si existieran será el Poder Judicial el que resuelva, como si este tuviera autonomía. Lo tiene tan acotado y controlado como al Legislativo.
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Sobre la conciencia de López Obrador caerá empoderar y encumbrar a un individuo acusado de violación. Y como siempre, se victimiza y se dice objeto de una campaña de sus “adversarios” y de los “conservadores”.
Así descalificó también la manifestación de mujeres del 8 de marzo. Una “provocación”, señaló el presidente; es decir, pasó de ser una “simulación” a una “provocación”.
Para todo el inquilino de Palacio Nacional se victimiza. Ignora a las mujeres, porque les quitó todos los apoyos que tenían; las violan, las matas, y no hace nada; se burla de ellas y las ofende: “provocadoras”, les dice. Sobre la marcha, señala: “Mucha falsedad, mucha hipocresía”.
No se pronuncia sobre el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo. Se limita a decir que serán ellas las que decidan. ¿Por qué no presenta una iniciativa sobre el aborto legal y utiliza su mayoría en el Congreso para aprobarla como lo hizo con la Ley de la Industria Eléctrica? Porque es un conservador.
Impone candidatas y candidatos en Morena sin importar sus antecedentes, lo que quiere son cómplices en espacios de decisión que le tengan lealtad a ciegas.
Va a imponer a Salgado Macedonio, a pesar de que muchas mujeres, incluidas las de Morena, se han pronunciado para que no sea candidato. La soberbia y su misoginia no le permiten escuchar.
Y sí, gracias a la decisión del presidente, un violador sí será gobernador.
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