Ciudad de México.- El juicio por el caso Narvarte no se frenará a pesar de la queja presentada ante la Comisión de Derechos Humanos local (CDHDF), por lo que el auto de formal prisión contra Daniel Pacheco Gutiérrez, queda firme, aseguró Edgar Elías Azar, presidente del Tribunal Superior de Justicia capitalino.
De acuerdo con el magistrado, la inconformidad por supuestos actos de tortura durante la detención y toma de declaración ministerial del probable responsable sentaría un precedente dañino pues bajo esta lógica cualquiera de los detenidos podría presentar una denuncia y con ello evitar que se le vincule a proceso.
“Por el simple hecho de ir a presentar una queja a la Comisión de Derechos Humanos que no ha sido investigada, que no se ha agotado los protocolos, crees que por eso es suficiente para otorgar la libertad a una persona, porque si fuera así con tu lógica pues todos los que están sujetos a proceso van presentan su queja y con tu lógica hay que sacarlos en libertad a todos no”, afirmó.
Respecto a la determinación de la Juez 25 Penal, Hermelinda Silva Meléndez, de impedir el acceso a medios de comunicación a a las audiencias por el caso del multihomicidio, dijo que es una decisión autónoma en que él no tiene injerencia, pero ratificó la confianza en ella.
Asimismo garantizó que el proceso sigue avanzando conforme a derecho y gracias a la discreción que la juez ha tenido en este tema, seguirá confiando plenamente en su actuación.
Por esa razón, el expediente de la detención del segundo probable responsable, Abraham Torres Tranquilino, se sumará a las actuaciones que se llevan en el Juzgado donde fue consignado el Pacheco Gutiérrez.
Cabe recordar que el primer detenido por el múltiple homicidio de la Narvarte, presentó una queja ante la CDHDF investiga presuntas tortura a detenido y presuntas violaciones al debido proceso, misma que sigue vigente y en los próximos días el Órgano autónomo deberá pronunciarse.
De igual manera sigue en integración la averiguación previa por las supuestas filtraciones de información, y la queja sobre el mismo tema que ocasionaron la fuga de algunos de los implicados del homicidio de Narvarte.
Además de entorpecer las investigaciones sobre el caso, han originado el malestar entre diversas organizaciones civiles, activistas, familiares y amigos de las víctimas.
Manifestó que el ex policía y segundo detenido por los hechos en la Narvarte tuvo derecho a apelar por su libertad condicional.
“Se le dictó sentencia con una penalidad menor a 5 años y tenía derecho a esa libertad, está en la Constitución y en ley y la ley, se tiene que aplicar, el juez que lo libera, que no fue preliberación y que le dio el beneficio, qué va a saber que se metió en otro lío mayúsculo”, aseveró.
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