Morena, el pasado jueves, junto con sus aliados en la Cámara de Diputados aprobaron una reforma para intentar regular los créditos de nómina.
Sin embargo, esta propuesta es grave y lesiona completamente los ingresos de los trabajadores.
Una vez más Morena, PT y PVEM mayoritearon para aprobar esta reforma.
Con ello, pretenden nada más y nada menos, embargar el salario de los trabajadores.
Sí, lo leyó bien, embargar el salario sagrado de cada trabajador que por alguna necesidad tiene que recurrir a un crédito.
Esto contraviene el espíritu que salvaguardan distintos artículos de la Ley Federal del Trabajo.
En específico, que en materia laboral no hay cesión de derechos perjudiciales al trabajador.
Y la máxima de que el sueldo no puede ser embargable antes de ser percibido.
Después de esta pifia de diputados y senadores de Morena y sus aliados del Verde y el PT, en la conferencia matutina, el presidente López manifestó su desacuerdo con la reforma.
Morena
Lo que a todas luces materializa un juego perverso y de doble discurso.
Es decir, Morena y aliados juegan al policía malo y el Presidente al policía bueno, no se las creemos.
La intención de fondo, a todas luces, es la de embargar el salario de los trabajadores.
Y hacerlo en favor de instituciones financieras como las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (SOFOMES) y otras entidades crediticias.
En Acción Nacional no caeremos en este juego perverso.
El propio Presidente ha dicho públicamente que ninguna reforma impulsada por Morena y sus aliados están ausentes de su conocimiento.
Es decir, el Presidente conocía el contenido y alcance de la reforma.
Sin embargo, a unos días de la consulta de Revocación de Mandato, se erige como defensor de los trabajadores.
Nada más falso, mientras la iniciativa retrógrada y lesiva para los trabajadores, avanza en ambas Cámaras Legislativas, con la aprobación de Morena y sus rémoras.
Hay que destacar que esta reforma provocaría un sobre endeudamiento de la clase trabajadora.
Y que las cláusulas por los nuevos créditos adquiridos serían absurdas y abusivas, con altísimas tasas de interés.
La Ley Federal del Trabajo, en sus artículos 91 al 112, establece que el salario de los trabajadores es inembargable y que no se pueden ceder derechos en materia laboral.
Sin embargo, lo aprobado por Morena, Verde y PT pretende introducir las figuras de la cobranza delegada.
Es decir, convertir al patrón en un obligado solidario para descontar el salario de los trabajadores los créditos de nómina, incluso antes de que llegue a las manos de los trabajadores.
Por otra parte, la libranza irrevocable, que obligaría a los trabajadores a firmar un consentimiento a la parte patronal para que su salario sea secuestrado, insisto, es una reforma lesiva.
Está en manos del Senado no aprobar esta reforma que afecta a los trabajadores.
De lo contrario, veremos si el Presidente, como se comprometió, deberá ejercer derecho a veto legislativo para evitar se concrete esta obscena reforma.
Aún con todo esto, de avanzar esta iniciativa en el Senado, desde Acción Nacional promoveremos los amparos correspondientes y la acción de inconstitucionalidad contra esta reforma dañina para la fuerza laboral de nuestro país.
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