Piden no politizar la seguridad y es lo primero que hacen

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El tema de seguridad pública no se debe politizar.

Así lo han dicho personajes como la jefa de gobierno, alcaldes y más recientemente diputados que se llenan la boca con la frase.

Pero eso fue justo lo que ocurrió durante la comparecencia del secretario de Seguridad Ciudadana (SSC) Omar García Harfuch ante el Pleno del Congreso capitalino.

Discursos plagados de política por parte de los legisladores marcaron el encuentro del jefe de la Policía con los diputados de la CDMX.

Como ha ocurrido desde que inició la Segunda Legislatura, legisladores y legisladores sucumbieron a la tentación maniquea de confrontarse sobre quienes son más buenos y más malos para gobernar.

El termómetro para medir triunfos y fracasos fue por supuesto el de la seguridad.

En medio del pleito político que se sucedía en la tribuna del Congreso local, Omar García Harfuch observaba imperturbable el pleito de panistas y morenistas o el que protagonizaron el perredista Jorge Gaviño y el pevemista Jesús Sesma.

ABREN FUEGO

La panista Daniela Álvarez, que hoy forma parte de la Asociación Parlamentaria Ciudadana, soltó el primer golpe.

Acusó una disminución de 500 millones de pesos en el presupuesto de la SSC, pero fue a más.

Dijo que una estrategia de seguridad efectiva no es sentarse todos los días en un gabinete de seguridad, porque eso es lo que hace el Presidente de la República “y vean los resultados”, acusó.

Respondió así a las críticas que surgen desde la 4T, por la ausencia de los alcaldes de oposición en los gabinetes de seguridad.

Álvarez exigió que el partido en el poder se deje de mezquindades y no politice el tema de seguridad.

Pidió que se deje de cuestionar la efectividad del programa Blindar Benito Juárez que puso en marcha el alcalde panista Santiago Taboada, a quien llenó de halagos.

A Morena le dijo que en vez de criticar celebre que el programa Blindar se retomó en Coyoacán, Álvaro Obregón y en Miguel Hidalgo.

EVITAN QUEMAR LA MARCA

Daniela Álvarez fue la panista que quemó las naves, aunque por ser parte de una sui generis Asociación Parlamentario no lo hizo directamente a nombre del PAN.

Los de Acción Nacional evitaron así desgastar la marca en esta comparecencia del titular de la SSC, donde su combatividad lució apagada.

Un tibio Gonzalo Espina subió a tribuna para ponerse a disposición de García Harfuch en todo lo que requiera para modificar el marco normativo y fortalecer las facultades de la SSC.

Espina también dijo que el PAN está dispuesto para abonar a que la Policía capitalina cuente con más presupuesto para el siguiente año.

INSISTEN EN REUNIONES DE GABINETE

En defensa de la 4T salió la que fuera una aguerrida perredista de Iztacalco, Elizabeth Mateos.

Lamentó que los alcaldes de la UNACDMX se ausenten de los gabinetes diarios de seguridad que se realizan temprano en el gobierno de la Ciudad.

Acudir a esas reuniones, dijo, habla de la disposición y la necesidad de coordinar esfuerzos en todos los niveles para combatir a la delincuencia.

Luego tomó la palabra el legislador del PVEM Jesús Sesma.

SESMA, GENIO Y FIGURA

Genio y figura de este Congreso, Sesma fue de nuevo Sesma con un posicionamiento cargado de reverencias.

El pevemista empezó su discurso al afirmar que la CDMX tiene un secretario de seguridad para mucho tiempo.

Luego habló de los fracasos en la seguridad que tuvieron los gobiernos panistas de Fox y Calderón.

Sus palabras sonaban ajenas, de otro tiempo y otro espacio, como si el PVEM no hubiera hecho en su momento alianzas político-electorales con aquellos que hoy critica.

Poco hubo que rescatar de lo que dijo Sesma, porque más trascendente fue lo que dijeron de él sin siquiera mencionarlo.

Quien tuvo el tino de hablar de esa evidente sumisión fue el perredista Jorge Gaviño.

“Vienen aquí a tribuna y critican a un gobierno del que fueron aliados y que sirvieron de tapete a ese partido en su momento.

“Y ahora aquí, a toro pasado, critican cuando en su momento vinieron a exigir con la misma elegancia en su decir”, lanzó Gaviño, pero sin mencionar siquiera el nombre de Sesma.

Apoyado en datos de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe), el del PRD dijo que prevalece una alta percepción de inseguridad en la CDMX.

Acusó también una alta impunidad, pues 93 por ciento de los delitos no se denuncian, lo que genera una alta cifra negra que impide tener datos objetivos para hablar a cabalidad de una disminución de los ilícitos.

Gaviño terminó esa intervención con la frase: “La seguridad no debe ser un tema partidista”.

EL NO ALUDIDO

Sin haber sido aludido, Jesús Sesma subió con enfado a la tribuna para pedir respeto al invitado en el Congreso, en referencia a García Harfuch.

Se lanzó en un monólogo de insultos hacia Gaviño.

Le dijo que para tener la lengua larga hay que tener la cola corta y le exigió una disculpa, “porque no puedo permitir el término de tapete sobre mi persona y mi partido”, subrayó el pevemista.

Agregó que se debe tener mucha cara dura y hablar de los demás cuando se tiene una larga historia de bandazos y traiciones.

Le recordó a Gaviño su paso por el PRI, el PAN, Nueva Alianza y el PRD.

Para rematar en los insultos Sesma le restregó al del PRD su edad.

“Creo que los años no pasan en vano y le están cobrando esa factura”, atacó el pevemista.

Cuando bajó de la tribuna Sesma se dirigió a la curul de Gaviño y le extendió el saludo con una risa sardónica.

Se entretuvo ahí, cruzando palabras con el del PRD, sin importarle que Omar García Harfuch se había puesto de pie para esperarlo en el protocolo de salutación.

LA RÉPLICA

En la réplica por parte del PRD iba a subir a tribuna la legisladora Polimnia Romana, pero no lo hizo.

Le cedió su lugar a Gaviño, aunque antes la diputada se dirigió a la curul que, como invitado, ocupaba el Jefe de la Policía.

Polimnia Romana le entregó un folder morado a García Harfuch y le hizo una serie de peticiones.

Él, visiblemente apenado, solo asentía desde su lugar, mientras que todos los presentes esperaban que la legisladora subiera a tribuna.

Luego de casi un minuto de dialogar en voz baja, la diputada dijo que cedía su turno a Jorge Gaviño.

El del PRD aclaró de inmediato que nunca mencionó el nombre de Sesma y le dijo que, si se sentía aludido “ese es su problema”, replicó.

Sobre el ataque por su edad, el perredista respondió con un “¿y eso qué?”.

Dijo que sostenía lo dicho sobre aquellos que se ponen de tapete, porque consideró que los partidos políticos no deben ser tapete de nadie.

“Ojalá que la mayoría de los jóvenes que están aquí llegaran a la edad que tengo y todavía más allá”, concluyó Gaviño.

EN PALABRAS DE LA 4T

Los diputados de Morena no se quisieron quedar atrás en este juego de señalar culpas y fracasos.

La legisladora Marisela Zúñiga subió a tribuna para acusar la ineficiencia de programas de seguridad como el que se desarrolla en la alcaldía Benito Juárez.

Lo comparó con lo hecho por la alcaldesa Clara Brugada en Iztapalapa.

Dijo que en Iztapalapa se registra un delito por cada 694 habitantes, mientras que en Benito Juárez, una demarcación menos poblada, la incidencia es de un ilícito por cada 327 habitantes.

Luego, se refirió al criterio territorial para enfatizar su idea.

Expuso que en Iztapalapa se presenta una incidencia de 22.5 delitos por cada kilómetro cuadrado.

Pero en Benito Juárez, una alcaldía cuatro veces más pequeña, la incidencia es de 49.9 delitos por cada kilómetro cuadrado.

Zúñiga exhortó a los alcaldes integrantes de la UNACDMX a que acudan a las reuniones del gabinete de seguridad que se realizan todos los días a las 6:00 horas en el gobierno de la Ciudad.

Les sugirió que pongan su despertador temprano para que puedan llegar a tiempo.

Mientras, el mensaje de no politizar quedaba en el tintero.

 

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