Como cada año llegó la tan esperada temporada de “Chiles en Nogada”, el platillo más emblemático de la cocina mexicana y en esta ocasión hablaremos de la propuesta que ofrece la chef Lula Martín del Campo con su restaurante Cascabel.
Pero antes de entrar en detalles, cabe destacar que Lula tiene un profundo amor por México y sus raíces, así que su restaurante es un homenaje a la cocina mexicana tradicional basada en los alimentos de que produce la Milpa: maíz, chile y frijoles.
Así que Cascabel ofrece una cocina basada en estos alimentos y otros de la cocina tradicional. Además en su restaurante no sólo vas a deleitarte de sus riquísimos platillos sino también conocerás un poco más de nuestra cocina y sus alimentos con preparaciones novedosas y modernas, pues su propuesta es una combinación de lo tradicional con lo moderno.
Cuando lo visitas, en la entrada encontrarás una exposición de una serie de frijoles y maíces endémicos, ubicados por nombre y región, que de acuerdo a la temporada podrás comer ahí, pues para Lula es importante consumirlos, ya que si no se hace, se perderán, la gente dejará de cosecharlos.
Además todo el restaurante está inspirado en nuestra cultura con mobiliario y textiles, e incluso sus vajillas son hechas por manos de artesanos mexicanos.
El Chile en Nogada de Cascabel
Con estas referencias, ya te podrás imaginar como fue la visista para probar su Chile en Nogada.
Primeo nos recibió con unas quesadillas de tortilla azul rellenas de quelites y queso, y una propuestas de salsas que fueron el complemento perfecto.
Le siguieron unos exquites estilo Cascabel, repletos de queso y crema y una mayonesa aderezada de chile y otros condimentos que le proporcionaron un gran sabor.
Y de plato fuerte, el Chile en Nogada, una preparación tradicional, sin capear, equilibrada en condimentos y fruta y la nogada un deleite, bien ejecutado y con alimentos de primera calidad y sabor. Fue acompañado de un vino rosado de Casa Madero.
Comer un Chile en Nogada en Lula fue un deleite, además es lugar agradable y acogedor, un rinconcito escondido de Santa Fe, que fue el broche de oro de esta degustación.
Imprimir artículo