El restaurante Magda, propiedad del reconocido chef Mario Espinosa, que recientemente abrió sus puertas, inició su temporada de «Chiles en Nogada«, y esta vez invitó al chef poblano Ángel Vázquez, dueño de Augurio en Puebla, a preparar este emblemático platillo mexicano para Magda durante toda la temporada.
Una colaboración interesante porque tanto en Magda como en Augurio y Madederos se podrá degustar su versión en capeado con carne y el que va relleno de pato, pero el de pato irá cambiando de restaurante en la semana.
Durante la presentación que realizaron los chefs Espinosa y Vázquez, para invitados y medios, Vázquez comentó que su versión de «Chiles en Nogada» viene de una receta de sus tías bisabuelas que fueron cocineras del Convento de Santa Mónica, justo el sitio en donde se originó este platillo con el cual las monjas agustinas agasajaron a Agustín de Iturbide por la Independencia de México.
Su receta es capeado, muy ligero y el relleno está compuesto de la tradicional fruta de temporada plátano, manzana, pera, durazno, originarios de la región, además de ciruela y trozos de carne picada.
En este hay un equilibrio entre la carne y las frutas, los trozos de carne, ligeramente grandes, aportan un sabor atractivo con lo agridulce de la fruta. y que decir de la nogada, elaborada con la nuez, queso de cabra sin pasteurizar artesanal poblano, que es duro y salado con unas gotas de jerez y un poco de leche.
La porción por chile va de 230 mg. a 250 mg. y el baño de nogada es abundante, y para cerrar con broche de oro, los chefs invitaron a maridarlo con champage ¡Delicioso!, pues el vino espumoso realzó los sabores, una combinación perfecta.
El precio de»Chile en nogada» es de $550 para el de carne y $580 para el de pato.
Pero antes, como entrada ofrecieron una Tostada de Trucha Salmonada con jocoque, quelites y pepinillos con ceniza de hierbas, fresca y muy ligera.
Y como segunda entrada, Tostada de Chicharrón Regio con cremoso de aguacate y pepinillos, uno de los platillos estrella de Magda, muy rico.
Y como postre, porque no podía faltar el postre, Sorbete de Granada que consistió en un plato de frutas con helado y en vez de galleta llevaba un trozo de campechana, que le aportó un sabor interesante y las frutas ideales para digerir el chile.
Cómo aperitivo y antes de entrar de lleno a la comida, recomendamos el cóctel Angustina prepado con tequila, un poco de granada, toronja y chile piquín.
Magda tiene pocos meses de su apertura y está ubicado a un lado de las instalaciones del Museo del Carmen, antes convento, en San Ángel y como en las propuestas del chef Espinosa, su diseño es fruto y colaboración del arquitecto Ricardo Casas que rescata esa atmósfera muy mexicana de San Ángel, pero en un estilo contemporáneo.
Su propuesta es cocina de productos frescos y de temporada, además su nombre rinde homenaje al Río Magdalena, el único río vivo de la CDMX.
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