La gastronomía mexicana es tan amplia y basta que logra darnos gratas sorpresas como el Figadete, un platillo del centro-norte de nuestro país, específicamente de Zacatecas, poco conocido por la mayoría de los mexicanos y que ahora se busca impulsar, pues de lo contrario desaparecerá.
Así lo dieron a conocer Francisco Javier Acuña, promotor independiente del Figadete y Alicia Almanza, secretaria del Sector Agroindustrial de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canancintra), quienes en el marco del Foro internacional Agroindustrial organizaron una presentación en la Ciudad de México para incentivar su consumo a través de una degustación.
Data del silo XIX
El evento se llevó a cabo en el restaurante Tristán en la colonia Condesa y asistieron diversas personalidades del ámbito empresarial, musical y diplomático, quienes se dieron cita para probar por primera vez este platillo que tiene sus más antiguas referencias históricas a finales del siglo XIX y con un periodo de auge en los años posrevolucionarios, para posteriormente perder su gusto por él, hasta caer actualmente en vías de extinción si no se impulsa nuevamente su elaboración y consumo.
Por otro lado, Almanza, dijo que esta degustación forma parte de los esfuerzos de difusión de la herencia gastronómica y alimenticia que lleva a cabo el Foro Internacional Agroindustrial, cuya más reciente edición se realizó a finales de octubre y principios de noviembre en la CDMX, y que tendrá en Mexicali, en abril del próximo año, su cuarta edición.
Un platillo de la cocina zacatecana
El maestro Acuña, quien entre muchas otras actividades es presidente fundador del Patronato del Museo Zacatecano A.C. e integrante de la Asociación de Amigos del Patrimonio Cultural de Zacatecas, fue el encargado de dirigir la degustación y explicó que las referencias documentadas del origen del Figadete son escasas, siendo evidentemente un plato de la cocina criolla con herencias españolas y enriquecido con especies e incluso frutos mexicanos.
Para conocer su versatilidad se organizó un menú de cinco tiempos y se acompañó con agua y vino.
El maestro explicó que el Figadete es un delicioso ensamble y maceración de las partes más finas de carne magra (carne tierna y lomo) del cerdo, con frutos en almíbar y legumbres que evidencian las mejores técnicas del encurtido en vinagre de chiles y espacies de nuestra nación.
En pocas palabras es un concentrado de carne de cerdo que se fríe y se acompaña.
En sus orígenes, explicó, el Figadete no fue un plato de bajo costo y se ofrecía únicamente en fechas importantes.
Se presentaron cinco formas de prepararlo
El menú consistió en probar el Figadete en cinco presentacioness:
Como relleno en una empanada y acompañada de una salsapicante.
En crema de chicharrón, que consiste en una sopa de jitomate y chile a la que se le agrega el Figadete.
Frito y servido como relleno en un taco con salsita.
Preparado en “Frijoles puercos”, donde se fríe y se agrega a un caldo de fríjoles espeso y se revuelve.
y como una fritura que se revuelve en una ensalada de verduras como plato frío.
En realidad el Figadete es un plato muy versátil, muy sabroso y práctico. Su concentrado de carne y grasa, condimentado con chile, lo hacen un excelente complemento para cualquier platillo, además es muy fácil de preparar, ya que sólo se saca del paquete, se fríe y se sirve, además marida muy bien con el vino.
Previamente, Francisco Javier Acuña y Alicia Almanza presentaron un breve video con una pequeña reseña de “la señora Altagracia”, tía del maestro Acuña, y quien es depositaria directa de la receta original del Figadete transmitida por su abuela y su madre en Jerez, Zacatecas.
Asimismo, el maestro Acuña explicó que se desconoce el origen de la palabra Figadete, por lo que incluso no se descarta alguna probable raíz italiana, al tiempo que mencionó los textos de las únicas cuatro referencias bibliográficas que se tienen de éste.
Se aderezó la velada con fragmentos del poema «Suave Patria» de Ramón López Velarde
El también escritor, conferencista y defensor de derechos humanos, hizo una permanente referencia a la obra poética del ilustre jerezano Ramón López Velarde, en cuya obra existen diversos pasajes que hacen referencia a la comida y la herencia gastronómica de nuestro país, al tiempo que deleitó a los comensales con diversos pasajes de su poema Suave Patria.
Como punto final del evento el tenor Juan del Bosco interpretó Paloma Querida de José Alfredo Jiménez y se congratuló de este esfuerzo conjunto entre Francisco Javier Acuña y Canacintra para impulsar y rescatar a un guiso mexicano tan destacado como el Figadete.
En el evento estuvieron presentes también directivos de cámaras empresariales; el prosecretario nacional de Canacintra, Francisco Anzures y desde luego los anfitriones de Tristán, Diego y Mildred Arjona.
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