Las autoridades de la Ciudad de México han vinculado el asesinato de dos mujeres venezolanas, Stephanie «N» y Susej «N», encontradas muertas y calcinadas en Tlalpan, con la banda de trata de personas conocida como el Tren de Aragua.
Esta organización criminal, formada en cárceles venezolanas, explota sexualmente a mujeres venezolanas en la Ciudad de México, reteniendo sus documentos para forzarlas a trabajar.
Un video presentado por el periodista Carlos Jiménez muestra el vehículo en el que las víctimas fueron transportadas y a tres hombres, presuntamente miembros de esta banda.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana rastreó el automóvil hasta la alcaldía Benito Juárez, donde fue asegurado.
La calle de Sullivan, ubicada en la Ciudad de México, es conocida por ser una zona donde se ejerce el trabajo sexual desde hace décadas.
En los últimos años, la situación ha cambiado debido a la llegada de trabajadoras sexuales extranjeras, especialmente de países como Venezuela.
El conflicto por el control del área de Sullivan se ha intensificado con la presencia de grupos criminales, como el Tren de Aragua, una organización de trata de personas originaria de Venezuela.
Esta banda ha comenzado a operar en la Ciudad de México, explotando sexualmente a mujeres venezolanas y controlando ciertas áreas, incluyendo Sullivan.
Tren de Aragua son los responsables asesinato de 2 mujeres venezolanas
Este control se ejerce mediante la retención de documentos de las mujeres, forzándolas a trabajar bajo amenazas y condiciones abusivas para pagar deudas.
La incursión del Tren de Aragua ha generado tensión entre las trabajadoras sexuales mexicanas y las extranjeras, quienes compiten por los mismos clientes y espacio.
Las trabajadoras mexicanas han visto amenazada su actividad, lo que ha llevado a enfrentamientos tanto verbales como físicos. Las disputas no solo son por el control territorial, sino también por las diferencias en las tarifas, servicios y el trato hacia los clientes.
Las autoridades han incrementado la presencia policial en la zona, pero la violencia continúa, afectando a todos los involucrados y desestabilizando la seguridad en Sullivan.
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