Habitantes del pueblo de Santa Úrsula Xitla en la alcaldía Tlalpan, bloquearon por varias horas la avenida Insurgentes Sur para exigir a las autoridades capitalinas que detengan la construcción del desarrollo Residencial Fuentes Brotantes 134.
Los manifestantes acusaron que este proyecto inmobiliario provocará un daño ambiental irreversible en la zona, con sus 52 viviendas y 147 cajones de estacionamiento.
Argumentaron que el desarrollo residencial requerirá 114 mil litros diarios de agua, lo cual impactará de manera negativa en un sistema de abasto que de por sí resulta insuficiente.
LA PROTESTA
Los vecinos se desplegaron sobre los dos sentidos de avenida Insurgentes a la altura del Metrobús Fuentes Brotantes, mostrando pancartas y cartulinas en rechazo al proyecto inmobiliario.
Ahí dieron lectura a un pliego de exigencias dirigido a las autoridades del gobierno capitalino y de la alcaldía Tlalpan.
“Nos oponemos a proyectos de lujo que no aportan beneficios a la comunidad y que agravan la crisis hídrica de la ciudad.
“Rechazamos todas las formas de colonización y gentrificación que transforman nuestra ciudad, incrementan los costos de vida, desplazan a nuestros habitantes originarios y acaban con nuestra riqueza natural y cultural”, leyeron.
EXIGENCIAS
Como parte de sus exigencias, los vecinos pidieron la clausura inmediata de la obra de Camino a Fuentes Brotantes 134, por violar las normas de protección ambiental y los derechos de los pueblos originarios, ya que no se ha tomado en cuenta a los vecinos aledaños al proyecto.
Exigieron la revocación de la autorización de factibilidad de captación, uso y aprovechamiento del agua por parte de la Secretaría del Agua en la obra.
También incluyeron la revocación de la manifestación de impacto ambiental, así como de cualquier procedimiento administrativo que pretenda modificar el área de amortiguamiento del Parque Fuentes Brotantes.
Los vecinos pidieron también la intervención del Instituto de Antropología para la clausura del proyecto inmobiliario, pues dijeron tener pruebas de la existencia de piezas arqueológicas en esa zona.
Solicitaron que se desconozca cualquier convenio ilegal que se haya hecho a espaldas de los vecinos y que “engañosamente, la empresa constructora utiliza para derribar árboles”.
También incluyeron la revocación de los permisos de construcción para zona habitacional, es decir, la construcción de las mas de cincuenta casas.
Otra solicitud de revocación que incluyeron es la del permiso de uso de suelo y pidieron a las autoridades revisar técnicamente toda la zona ambiental y urbana pues el área no puede sostener más construcciones.
CONSULTA
Las y los vecinos exigieron que se realice una consulta en materia de pueblos originarios, para no permitir la construcción de casas u otros inmuebles en la zona, mediante convocatoria con leyes tradicionales y sus procedimientos establecidos.
“Esto asegura que se respete el derecho a la consulta y la autodeterminación de las comunidades”, dijeron.
A la alcaldía Tlalpan que encabeza Gabriela Osorio le pidieron que aplique la clausura inmediata de la obra, por violar normas de protección social, así como por la falta de factibilidad de afluencia de tránsito.
Además, consideraron que se debe revocar la autorización de cualquier tipo de descarga de aguas y se realice una revisión técnica del área para evitar inundaciones y hundimientos en la zona.
Por último, exigieron que se resarza el daño ambiental que ya se ha causado en este espacio, mediante la reforestación del predio y no con compensaciones económicas, pues consideraron que son incompatibles con el valor ambiental de los árboles, bosques y agua.
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