Instalado como parte del Constituyente Permanente, el Congreso capitalino aprobó esta tarde una minuta de reforma a la Carta Magna federal que eleva a rango constitucional el programa Jóvenes Construyendo el Futuro.
Con esta reforma se establece que los jóvenes de entre 18 y 29 años que no estudian ni trabajan recibirán durante 12 meses un apoyo económico que equivale a un salario mínimo general vigente.
La minuta se aprobó por unanimidad, con 58 votos de legisladores de todos los partidos políticos.
Incluso la bancada del PAN otorgó su voto de apoyo, a pesar de la críticas de legisladores de ese partido como Ricardo Rubio y Federico Chávez.
Argumentaron que estos programas no deberían dirigirse a las personas jóvenes que ni estudian ni trabajan, pues dicha iniciativa no premia el esfuerzo.
“La inflación como resultado del financiamiento público basado en deuda a través de estos programas en cinco años nos va a explotar”, alertó Federico Chávez.
En defensa de la minuta, diputados de Morena expusieron que según datos de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, 61 por ciento de los beneficiarios de Jóvenes Construyendo el Futuro, consiguieron empleo
Destacaron que se han destinado 115 mil millones de pesos en beneficio de casi 3 millones de jóvenes.
Afirmaron que elevar a rango constitucional el programa “Jóvenes Construyendo el Futuro”, no es un acto asistencialista sino una iniciativa estratégica al capital humano, destinada a garantizar que cada joven reciba el apoyo necesario para capacitarse y acceder a empleos dignos.
La minuta enviada por el Senado de la República adiciona un Segundo Párrafo al Artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
El diputado Paulo García González reprochó a los legisladores de derecha por construir una narrativa que sólo discriminaba a los jóvenes al llamarlos “ninis”.
Celebró que ahora, cuando ya es un derecho, nadie pueda quitarle ese apoyo económico a quienes inician en la vida laboral.