¡Saludos Ciudad de México!
Nos hemos enterado que…
En el Congreso de la Ciudad de México (CDMX) se cocina la primera acción de inconstitucionalidad contra los diputados locales por ser omisos en legislar la ley que prevendría la violencia política de género en la elección de 2021.
El juicio, independientemente de su resultado, será un interesante precedente en la CDMX porque pondrá a prueba el criterio de los integrantes de la Sala Constitucional del Tribuna Superior de Justicia de la CDMX (TSJCDMX) , que preside Rafael Guerra.
Lo paradójico del tema es que es una acción de inconstitucionalidad, con base en el artículo 36 de la Constitución local, que promoverán integrantes del grupo mayoritario del Congreso capitalino: Morena.
Apenas se trabajan borradores de una Demanda por Omisión Legislativa que permitría que las Reformas sobre Violencia Política tengan vigencia durante el próximo proceso Electoral. Esto conllevaría una sanción para los legisladores omisos que en primera fila llevan al vicecoordinador de Morena, José Luis Rodríguez, y los demás coordinadores y vicecoordinadores de la Junta de Coordinación Política, que preside el panista Mauricio Tabe.
En uno de los borradores se asienta que hubo "perversidad de los legisladores faltistas" como fue el caso de los morenistas Temistocles Villanueva o Leticia Varela.
Para lograr el cometido basta que diez diputados se sumen a la demanda y a la acción de inconstitucionalidad, que con facilidad se lograrán en el grupo que comanda Valentina Batres y otras legisladoras que fueron vulneradas por sus compañeros como Paula Soto, promovente de las reformas en pro de las mujeres que hacen política en la CDMX.
Es una buena señal que en la capital del país se eche a andar la maquinaria judicial para la defensa de los derechos humanos.
Veremos de qué lado está la Sala Constitucional y el TSJCDMX, que se ven muy pegaditos a la jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum.
Una de mil…
Imprimir artículo
