Un cambio en la dinámica de la Ciudad de México

Ciudad de México.- Antes de entrar propiamente en la materia de esta columna, quiero extender un saludo afectuoso a las y los lectores de Capital CDMX, será para mí un gusto poder saludarles cada dos semanas en este espacio. Quedo atento a sus comentarios y opiniones en @EspinosaSilis.

Los resultados de la elección del pasado 1 de julio, combinados con el nuevo marco juridico de la Ciudad de México representarán un cambio importante en la dinamica de nuestra Ciudad.

Empezando por que el próximo 17 de septiembre entrará en vigor en su totalidad la nueva Constitución Política de la Ciudad de México, a partir de ello comenzarán a funcionar nuevas figuras que tendrán importantes funciones de gobierno. En este espacio abordaré algunas de las relativas a la Jefatura de Gobierno y las Alcaldías.

Quizá la modificación más notable con respecto al esquema anterior sea la transformación de las actuales delegaciones políticas a las alcaldías. Estas, a diferencia de las actuales delegaciones, serán órganos político-administrativos los cuales estarán integrados por un alcalde o alcaldesa y entre 10 y 15 concejales. 

Esto implica que ahora además del alcalde o alcaldesa, habrá un colegiado que tomará decisiones respecto de la demarcación territorial, el cual estará integrado en una mayoría por concejales que provienen del mismo partido político que el alcalde o alcaldesa y una minoría que pertenecen a fuerzas políticas opositoras.

Los concejos de las 16 alcaldías electas en 2018 se integrarán por la o el alcalde y diez concejales (electos según los principios de mayoría relativa y de representación proporcional, en una proporción de 60% por el primer principio y 40% por el segundo), según se dispuso en el artículo transitorio vigésimo segundo de la constitución local. 

Esta conformación de las alcaldías Las y los integrantes de las alcaldías iniciarán funciones el 1 de octubre de 2018.

Cabe destacar que a partir de la integración 2021−2024 esta distribución de concejales será diferenciada en función del tamaño poblacional de cada demarcación.

Otro cambio significativo será la posibilidad de reelección consecutiva hasta por un periodo adicional de las alcaldesas, los alcaldes y concejales; es decir, quienes resultaron electos en los comicios de este año podrán optar por reelegirse en las elecciones de 2021.

Las funciones principales de los consejos estarán relacionadas con la supervisión y evaluación de las acciones de gobierno, el control del ejercicio del gasto público y la aprobación del Proyecto de Presupuesto de Egresos.

Las alcaldías y los concejos no son las únicas nuevas figuras que surgirán en el panorama político de la CDMX, pues también contara con el Cabildo de la Ciudad de México, el cual no guarda similitudes con los cabildos que hay en los ayuntamientos (integrados por síndicos y regidores), pues este órgano lo integrarán quien ostente la Jefatura de Gobierno de la Ciudad, así como los 16 titulares de las alcaldías.

Y aunque los anteriores son significativos, sin duda la diferencia más notable que existirá entre esta administración y todas las pasadas desde 1997 (año en que se eligió al Jefe de Gobierno por primera vez en la Ciudad de México), es la coincidencia política entre el presidente de la República y la Jefa de Gobierno, circunstancia nunca vista desde que los capitalinos podemos elegir en las urnas a nuestros gobernantes. 

Sin duda esto puede transformarse en dinámicas de cooperación muy positivas para las y los habitantes de esta ciudad.

www.strategiaelectoral.mx

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