Ciudad de México.- En la Ciudad de México (CDMX) los partidos políticos arrancaron campañas y en la primera semana su efervescencia no se ha sentido, un tanto por el fenómeno atípico de la pandemia que amenaza con una tercera ola y genera incertidumbre, y otro tanto porque todos los partidos políticos consolidados hicieron a un lado su ideología.
Una característica de este proceso electoral de 2021 es que no hay ideas que definan a los institutos políticos, pues sus programas están ligados a la premisa de unirse a la llamada cuarta transformación de México, convocada por el presiente de México, Andrés Manuel López Obrador, o resistirse a ella.
El ambiente que prevalece es de confusión porque los arranques no estuvieron marcados por los clásicos mítines robustos y en la semana ya empezaron los bandazos de políticos que sueltan los principios y se suman a una causa.
La laxitud de la contienda es más honda por la división interna de Morena, partido en poder, que ha retomado el pragmatismo para sumar a sus filas a experredistas o todo aquel que les garantice el triunfo. El caso más emblemático se observa en Cuauhtémoc, donde esta abierta la gran disputa entre Ricardo Monreal y Claudia Sheinbaum, asesorada por René Bejarano.
Quizá lo desdibujado de los partidos son el reflejo de las campañas desangeladas que podrían hundirse sí la pandemia arrecia.
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Sin ideología y divididos, arrancan disputa por la CDMX
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