Policía y servicios de inteligencia limitados por autonomía de la UNAM; narcomenudistas aprovechan desventaja

Ciudad de México.- Las personas dedicadas a la venta de drogas en avenida insurgentes, Universidad, Paseo de la Facultades, jardines y espacios públicos de ciudad universitaria aprovechan que la policía no puede ingresar a ese recinto porque la vigilancia corresponde a la propia UNAM.

Aunque la policía federal o local hace detenciones, la universidad no siempre los denuncia y varios quedan en libertad cuando llegan al juzgado. 

En enero comenzó a circular el video de una balacera grabado en las inmediaciones de CU, en las imágenes aparece un hombre de chamarra oscura y pantalón blanco que empuña una pistola.

El 30 de enero, una persona de 27 años de edad fue detenida cuando vendía droga cerca del estadio universitario, con él fueron capturadas otras dos personas de 18 y 23 años de edad, el último con antecedentes por robo.

La Procuraduría de Justicia capitalina descubrió que el imputado de 27 años al parecer es la misma persona armada que se ve en el video, pero la UNAM no lo denunció.

El 2 de febrero fueron llevados ante el juez de control con cerca de un kilo de marihuana y 15 gramos de metanfetaminas, y pese a ese incidente, recuperaron su libertad.

El viernes pasado ejecutaron a balazos a dos vecinos de la colonia Santo Domingo Coyoacán. Fancisco Axel Cayo, de 29 años de edad, y David Eugenio Alvarenga Baeza, de 20, murieron atacados a balazos en la zona conocida como Frontón, ubicado entre las facultades de ingeniería y contaduría después de una discusión; el homicida usó un arma calibre 9 milímetros.

El sujeto de mayor edad tenía antecedentes por delitos contra la salud en CU, había sido capturado en enero, pero un juez lo dejó en libertad; tres horas después del crimen la Policía detuvo a dos hombres en un taxi con droga y una pistola calibre .25.

Las autoridades federales también han realizado detenciones afuera del campus universitario; el 26 de febrero de 2016 fue capturado en CU Jorge Emilio Esquivel Muñoz, “El Yorch”.

Este individuo es identificado como uno de los ocupantes del auditorio Justo Sierra, como el “Che Guevara”, inmueble tomado desde hace 18 años por grupos relacionados con anarquistas y narcomenudistas.

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