Ciudad de México.- El ministro de Finanzas de Japón, Taro Aso, anunció que devolverá un año de su sueldo por su responsabilidad en la manipulación de documentos para eliminar su nombre, el del primer ministro Shinzo Abe y el de la primera dama Akie Abe, en un escándalo de corrupción, pero rechazó renunciar.
Aso devolverá de forma voluntaria 1.7 millones de yenes (15 mil 500 dólares), la cantidad anual que recibe como miembro del gabinete, pero mantendrá los más de 20 millones de yenes que gana como legislador, reportó la agencia japonesa de noticias Kyodo.
El ministro de Finanzas ofreció una vez más disculpas por la manipulación de documentos para borrar su nombre y la del primer ministro y su esposa, tras una controvertida compra de terrenos por parte de una guardería en medio de un escándalo de corrupción.
El anuncio de Aso, que rechazó los llamados de la oposición para que dimita, se produjo después de que el Ministerio de Finanzas reveló que 20 de sus miembros harán frente a medidas disciplinarias por su responsabilidad en el escándalo.
Determinó que las manipulaciones o falsificaciones fueron ordenadas por el entonces jefe de la Oficina Financiera, Nobuhisa Sagawa, quien defendió en reiteras ocasiones el acuerdo con la guardería Moritomo Gakuen.
En el centro del escándalo están unos terrenos comprados en 2016 por la guardería en la prefectura de Osaka y vinculada a Abe, su esposa y otros destacados políticos del país que apoyan su línea conservadora de enseñanza.
Los terrenos fueron vendidos a la guardería por un precio inferior a su valor de mercado, lo que originó acusaciones de favoritismo debido a que Akie Abe era de una de las personas que entregaba donaciones al centro.
Aunque ninguna investigación ha vinculado el falseo con Aso o Abe, el caso hundió la popularidad del primer ministro y la aprobación de su gabinete cayó 10 puntos hasta el 39 por ciento, de acuerdo con un reciente sondeo de opinión. (Notimex)
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