Mi velda

Ciudad de México.- Seis años de sufrimiento de la mayoría de las familias y amigos de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, en Iguala, Guerrero; aunque deberían ser 40 debido a que tres han sido identificados por restos óseos a cargo de expertos en genética de la Universidad de Innsbruck, pero igual, el dolor no desaparece.

Desde que anduvo en campaña el ahora presidente, Andrés Manuel López Obrador, prometió a los progenitores resolver, identificar y dar con el paradero de los jóvenes estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos’’, secuestrados y desaparecidos la fatídica noche del 26 y amanecer del 27 de septiembre de 2014.

La vara le ha quedado “alta’’ al señor que odia fifís, ternuritas, periodistas y a quién más no se le ocurra o sume. Hasta ahora sólo conocemos un informe temerario de la Fiscalía General de la República (FGR), cuando Alejandro Gertz Manero, refirió que “se acabó la verdad histórica’’.

Cuando el entonces procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, salió el 27 de enero de 2015 a informar a los medios de comunicación: “La verdad Histórica’. 

El único avance de los morenos hasta ahora es el hallazgo de los restos de Christian Alonso Rodríguez Telumbre, identificado también por la universidad austriaca.

De ahí paren. Que hayan encontrado a 10 kilómetros del tiradero del municipio de Cocula un sitio de nombre tétrico: “Barranca de la Carnicería’’ donde ubicó restos del tercer identificado, no han logrado más y no aporta nada al compromiso de López Obrador ya como jefe del Ejecutivo Federal.

Los otros dos son: Alexander Mora Venancio y Jhosivani Guerrero de la Cruz, quienes fueron los primeros en ser identificados por expertos internacionales por lo que serían 40 los que quedarían por localizar o identificar, lo que no es confortante o paliativo al dolor de las familias.

Que, si eran rijosos, malandrines o andaban en malos pasos, no era la forma en que les quitaran la vida. Nadie merece un destino de esa naturaleza y mucho menos a manos de narcotraficantes y autoridades municipales, estatales y federales, porque ahí participaron todos.

Esa es la verdadera delincuencia organizada, que “velda’’ saldrán a decir este día en que se cumplen seis años de la masacre, de esas que López Obrador dice y ríe que ya no ocurren en México y mucho menos en su administración, vaya que “velda… velda…’’ la suya.

Qué les dirán a las familias ante la falsa esperanza sembrada por el gobierno surgido de la conformación del tan “unido partido’’ Morena, que más bien es un “nido de víboras’’ y que comprometió al decir que los encontrarían muertos o vivos.

¡Válgame Dios!

Dirán que participaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), policías Federal, Estatal y Municipales de Guerrero. Que fue un asesinato múltiple orquestado, que ni qué.

La pregunta que no tendrá respuesta es, dónde están.

Siguen vivos o están muertos. Eso es lo toral, el resto es como ha sido su gobierno de mentiras, otros datos, falsedades o simulaciones anticorrupción.

COMMODATO

Las amadas mujeres, esas que no golpean, gritan, humillan, incendian, pintan o destruyen, saldrán este lunes 28 de septiembre a tomar las calles nuevamente, para demandar su derecho al aborto legal a nivel nacional y ya no sectorial, sino homogéneo en los 32 Estados del país.

Lucha que no es compartida por López Obrador. Porque de seguro respeta ese tema, así como lo hace a la libertad de expresión a quienes “les quitó el bozal’’.

Imprimir artículo Síguenos en Google News

Post más visitados en los últimos 7 días