Ciudad de México.- El sargazo que invade las playas del caribe mexicano puede ser utilizado para la creación de ladrillos de construcción.
Omar Vázquez, un jardinero mexicano, generó el invento que ha puesto a prueba en la creación de casas en Quintana Roo, donde es mayor la plaga de sargazo.
Su idea surgió hace cinco años, cuando se dedicaba a recolectar la macroalga en las playas de Quintana Roo, para después hacer composta.
Tras la contingencia de alga del 2015, Omar fue a su vivero para comenzar las pruebas de lo que serían los dos primeros bloques, como ladrillos, hechos con sargazo.
Los bloques son resistentes a la lluvia, inoloros, están compuestos de 60 por ciento de sargazo, además de productos orgánicos, pesan alrededor de cinco kilogramos y su costo de producción es entre un 25 y 27 por ciento más bajo que un bloque convencional.
Tras dos semanas de esfuerzo, Omar construyó Angelita, la primera casa con base de bloques de sargazo, nombrada así en honor a su mamá.
Cada casa tarda en construirse aproximadamente un mes y para ello son necesarias 20 toneladas de sargazo.
El proceso es sustentable, puesto que se utiliza una cantidad muy pequeña de agua para la creación de estas infraestructuras, y la que se usa es recolectada de lluvias y charcos.
"El mar es sabio y nos está diciendo algo con este arribo [masivo de alga]. Para todos es un problema, pero podemos limpiar las playas, generar casas y donarlas a personas de escasos recursos, y también generar más empleo", añadió el jardinero.
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