Ciudad de México.-La Comisión Instaladora de la I Legislatura del Congreso de la Ciudad de México se declaró formalmente instalada y en sesión permanente para avanzar en la desaparición de la ALDF y su transformación hacia el Congreso local.
Ya en las postrimerías de la séptima y última legislatura de la ALDF, el presidente de la Comisión Instaladora, el morenista José Alfonso Suárez del Real, dijo que los integrantes recibirán un finiquito por la labor legislativa establecido en la ley que para cada uno de los 22 asambleístas de Morena será de aproximadamente 300 mil pesos.
En el caso de los diputados de otras bancadas, detalló que además de ese finiquito contarán con un monto acumulado en una caja de ahorro, al que Morena no se sumó. Suárez del Real dijo no tener registrado que los legisladores salientes vayan a recibir un bono adicional por fin de Legislatura.
En la reunión celebrada en el salón Luis Donaldo Colosio, el presidente de la Comisión de Gobierno de la ALDF, Leonel Luna Estrada, aseguró que esta Comisión dará certeza de la transparencia y la rendición de cuentas de la VII Legislatura, que concluye, y generará el andamiaje para que el Primer Congreso local haga el trabajo con alto profesionalismo.
“Nuestro deseo es que a la Ciudad de México le vaya bien, nuestro deseo es que al país le vaya bien, nuestro deseo es que el Congreso Local, que entrará en funciones en el próximo mes de septiembre, esté a la altura de las circunstancias”, añadió.
En la instalación estuvieron presentes la diputada Francis Irma Pirín Cigarrero, secretaria de la Comisión, el diputado Andrés Atayde Rubiolo, secretario; la diputada Nora del Carmen Bárbara Arias Contreras, integrante; la diputada Mariana Moguel Robles, integrante y la diputada Abril Trujillo como invitada especial, además de funcionarios de la Asamblea Legislativa.
El diputado José Alfonso Suárez del Real, en su calidad de presidente de la Comisión Instaladora, informó que a la fecha se han llevado a cabo cinco reuniones operativas con las unidades administrativas para recibir el calendario de entrega de módulos ante la Contraloría y la presentación de la estructura de la Plataforma Web.
Además, se han analizado las Cuentas Públicas correspondientes a los años 2016, 2017 y la parte relativa al 2018. De igual manera, se revisa el proceso de acta entrega de los servidores públicos, así como la conclusión de las comisiones. Asimismo, se realiza el cotejo y verificación de los bienes muebles, tanto históricos como de uso cotidiano, de la Asamblea Legislativa, entre otras acciones.
“En estos procesos hemos encontrado la convicción, la institucionalidad y la eficiencia que nos permite garantizar una entrega completa, pulcra y la extinción jurídico-legislativa que ha lugar para dar paso al primer Congreso de la Ciudad de México”, resaltó el legislador del Grupo Parlamentario de Morena.
Por su parte, el diputado Andrés Atayde Rubiolo, del Grupo Parlamentario del PAN, expuso que esta transición entre Poderes no será testimonial ni cotidiana, será una transición histórica, ya que deriva del esfuerzo que mujeres y hombres empeñaron para contar con una Carta Magna.
“Después de muchos años, los derechos de la Ciudad dejaron de ser considerados una concesión del Poder Ejecutivo Federal. A nuestras y nuestros compañeros legisladores del Primer Congreso Local les corresponderá continuar con el trabajo iniciado por esta Asamblea Legislativa”, dijo.
Durante el evento protocolario, el diputado Leonel Luna Estrada agradeció a cada una de las legisladoras y legisladores que integraron la VII Legislatura, así como a los trabajadores del órgano parlamentario el trabajo realizado durante tres años. “Es una Legislatura que tuvo la oportunidad histórica de elaborar la legislación secundaria de esta ciudad. Acompañó a la Asamblea Constituyente en la elaboración de nuestra Constitución. En esta Legislatura se dieron aportes de trascendencia a la vida política, jurídica y administrativa de esta ciudad”.
A partir del primer miércoles del mes de agosto, la Comisión Instaladora sesionará en el salón Heberto Castillo del recinto de Donceles y Allende, a efecto de entregar el inmueble histórico –debidamente avalado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia-, totalmente restaurado y habilitado para recibir al primer Congreso local.
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