Ciudad de México.- En el Congreso de la Capital CDMX la disputa interna del grupo parlamentario de Morena es tan fuerte que han decidido abrir la caja de Pandora para demostrar quién es más corrupto.
Al parecer quedara atrás el interés de transformar la vida democrática de la capital del país y acompañar el proyecto del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que tampoco tiene un rumbo claro si de licitaciones se trata.
La semana pasada, el diputado Rigoberto Salgado hizo público que hay un tufo de corrupción en las licitaciones que ha hecho la Oficialía Mayor del Congreso capitalino que ha estado en manos de colmilludos políticos para mover el dinero. El primero fue Javier González Garza, quien asumió cono cuota de la entonces coordinadora de Morena, Ernestina Godoy. Tras escándalos de contratos a sobreprecio fue defenestrado y llegó Alfonso Vega, cuota de la diputada Guadalupe Morales, ni más ni menos que la presidenta de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública del Congreso capitalino.
El coordinador de Morena, Ricardo Ruiz, puso freno al debate en público para que no trascendieran los escándalos de corrupción que hay en Morena en la CdMx, pero la acción de Salgado incendió la pradera y han empezado a ser públicos los cochupos.
Hoy el diario Reforma destapó la compra a sobreprecio de agua para el Congreso en un contrato de 2.7 millones de pesos. En el radar también está la compra de trajes para el personal de resguardo que se pretendían comprar a un mayor monto del pactado históricamente.
La investigación de las licitaciones del Congreso capitalino por lo menos de enero de 2019 a la fecha tienen un dato relevante: la mayoría de las empresas ganadoras tienen domicilio fiscal en la demarcación Tláhuac, donde es representante popular Salgado.
Veremos hasta donde llega el escándalo al revisar cada una de las licitaciones que seguramente serán auditadas también por la Auditoría Mayor de la Ciudad de México.
Mauricio Tabe, líder de la Junta de Coordinación Política, ya pidió a la Contraloría interna investigar cada una de las licitaciones para no quedar en medio del lodazal.
Pese a los sombrerazos en Morena hay un poco de esperanza para enderezar el rumbo, ya que Ruiz logró esta semana que hubiera una reunión del grupo con los líderes de la tres vías: José Luis Rodríguez, Valentina Batres y Rigoberto Salgado.
El acuerdo en la mesa fue que pese a los conflictos internos y diferencias insuperables haya acuerdos que permitan sacar adelante las sesiones en el pleno y hacer énfasis en la agenda legislativa pactada en el grupo con la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
Los diputados de Morena deben reflexionar sobre los principios de Morena porque las traiciones ya están a la orden del día, las mentiras y el robo parece que pronto saldrán a la luz.
NOCAUT. Jorge Navarijo, titular de Comunicación Social del Congreso capitalino, que es cuota del grupo de Batres, no pierde la oportunidad de meter en líos innecesarios al órgano legislativo. Ahora sin consultar a los diputados intentó poner un cerco a los reporteros en la sala de prensa. Su albazo no prosperó, pero una vez más dejó ver su chabacanería o quizá su prepotencia al saber que en 2020 habrá cambios en los órganos administrativos del Poder Legislativo. ¡Abrazos, no periodicazos!
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