¡Saludos Ciudad de México!
Nos hemos enterado que…
La senadora Alejandra Barrales anda muy pegadita últimamente al dirigente del PRD en la capital de México, Raúl Flores, quien ya opera para ganar la coordinación del partido en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
No es que ande zopiloteando a Flores, pero bien sabe que en el PRD nadie puede ocupar dos cargos importantes a la vez y ya se hace visible para que si al dirigente se le da la nueva encomienda, ella pueda tomar las riendas de ese partido, que buscan enderezar o llegará al despeñadero. Sólo que ya fue líder del partido y por eso podría entrar a las carreras de gobierno que se abrirán antes del 15 de julio próximo.
Barrales tiene vivas sus viejas aspiraciones a la Jefatura de Gobierno y seguro ya le dijeron que se adelante o va seguir en el terreno de la derrota.
La desobediente
A quien no la calienta ni el sol azteca es a Leticia Quezada, la alumna más desobediente de René Bejarano, que al salirse del aula reprobó todas sus materias y dejó su capital político en manos del PRI.
Quezada ya no sabe si la traicionaron o si le tomaron el pelo en el PRD, lo cierto es que su curul plurinominal pende de una liga… Que diga de un hilo.
Lo lamentable es que sus opciones en la izquierda se reducen y el camino se achica a la puerta del PRI.
La secretaria
Quien en ya anda diciendo que se va es Rosa Icela Rodríguez, porque en el PRD se sostiene la teoría de que fue el principal apoyo de Morena a través del Instituto de Adultos Mayores del DF.
Sin embargo, la secretaria de Desarrollo Social del DF está operando hasta lo último para que el jefe de Gobierno reconsidere y por eso este fin de semana se reunió en un lugar del sur de la ciudad con los hombres fuertes de Morena en el DF, Ricardo Monreal y Martí Batres, para pedirles que cesarán los ataques contra el gabinete porque sino la llevarán entre las patas.
Una de mil…
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