Ciudad de México.- La ayuda internacional para la Ciudad de México continúa llegando, tras el sismo de 7.1 grados que se registró el pasado martes 19 de septiembre.
Un grupo de 67 rescatistas estadounidenses iniciaron recorridos por las zonas más afectadas de la capital mexicana para inspeccionar las condiciones y las posibilidades de encontrar con vida a personas atrapadas bajo los escombros.
Gerardo Serrano, funcionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), acompañó a los voluntarios de California, Estados Unidos y explicó las primeras acciones de este contingente serán de reconocimiento para definir cuál de las áreas se comenzará a trabajar.
"Son brigadistas, rescatistas del estado de California. Están haciendo recorrido de reconocimiento en determinados puntos de la ciudad y ver cuáles son las necesidades, cuáles son las características de los colapsos y derrumbes para ver qué equipos son útiles.
"Una vez que tengan los informes de las zonas que visitaron podrán desplegar su equipo", comentó el funcionario.
En un primer grupo, los 11 estadounidenses que acompañaron a Serrano visitaron Medellín y San Luis Potosí, donde se les aclaró que ya no era necesaria su intervención ya que los trabajos con máquinas pesadas iniciarían, después de que ya no se encontraron sobrevivientes.
Después se trasladaron a Petén y Zapata, en este punto se les confesó que solamente estaban a la espera de una confirmación de que ya no hay personas vivas debajo de los escombros, es decir, ya los radares térmicos ya no arrojaban señales de calor y los perros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tampoco percibían gente.
Entre el equipo de apoyo que trajo este grupo se encuentran cinco elementos caninos, herramientas, sensores y micrófonos, entre otros.
Los rescatistas estadounidenses establecieron un campamento en el Palacio de los Deportes donde terminan de desempacar su equipo, tras su arribo hace unas horas de este jueves.
Finalmente, el funcionario de la SRE dijo que han llegado a México equipos de rescate de España, Japón, Alemania, Israel, Honduras y Chile para agilizar las labores de ubicación de sobrevivientes.
