Ciudad de México.-La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó un probable daño al erario público por 168 millones de pesos, debido a irregularidades detectadas en el manejo del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud del ejercicio 2018 a cargo de los Servicios de Salud del gobierno de la Ciudad. Entre las anomalías se encuentran el pago a decenas de presuntos aviadores, así como rendimientos de cuentas bancarias que no fueron reintegrados a la Tesorería.
Estas irregularidades forman parte del Informe Individual del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública del año pasado. En el documento se desglosan ocho pliegos de observaciones, dos recomendaciones y tres promociones de responsabilidades administrativas, los cuales arrojan esos resultados.
En uno de los pliegos de observación, uno de los mayores daños al erario se detectó por el monto de 71 millones 800 mil pesos, por recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud 2018 que no fueron pagados al 31 de marzo de 2019 y por recursos del Fondo más rendimientos financieros generados que se reportaron como pagados a esa fecha y de los cuales no se presentó su documentación comprobatoria y justificativa correspondiente.
Además, la ASF ubicó rendimientos generados del 1 de enero al 31 de marzo de 2019 que no fueron reintegrados a la Tesorería de la Federación, en incumplimiento de la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios.
Otro daño que se presume al erario ascendió a 24 millones 902 mil pesos, por el hallazgo de diferencias entre el gasto reportado en el capítulo 1000 "Servicios Personales" y las bases de las nóminas.
La Auditoría también revisó 150 expedientes de trabajadores. De ellos verificó que 147 trabajadores cumplieron con el perfil requerido para el puesto desempeñado; sin embargo, 3 trabajadores no acreditaron el perfil correspondiente, por lo que existieron pagos improcedentes con recursos del fondo por 865.5 miles de pesos.
Del resultado de auditoría se presume un probable daño o perjuicio por 10 millones 970 mil pesos por pagos posteriores con recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud a 27 trabajadores que causaron baja y a dos trabajadores durante su licencia sin goce de sueldo; así como pagos cancelados que no fueron reintegrados a la cuenta del Fondo ni a la Tesorería Superior de la Federación, en incumplimiento de la Ley de Coordinación Fiscal.
De una muestra de 15 centros de trabajo de los Servicios de Salud, se constató que de un total de 2 mil 168 trabajadores reportados en las nóminas, 244 no laboraron en los centros de trabajo; de ellos 81 justificaron el motivo, de 146 trabajadores no se remitió documentación que acredite el motivo por el que no se encontraron laborando en dichos centros de trabajo y en 17 casos que remitieron documentación, los trabajadores no se encontraban laborando desde ejercicios anteriores, por lo que se generaron pagos improcedentes por 2 millones 964 mil pesos.
Además, de dos centros de trabajo no se remitió la validación de 167 trabajadores, lo que impidió verificar si durante el ejercicio 2018 se encontraron laborando; aún así, ese personal recibió remuneraciones por 15 millones 715 mil pesos.
Por los pagos a esos 146 trabajadores de los que no se presentó documentación, la ASF detectó un probable daño al erario por 48 millones 480 mil pesos.
La Auditoría Superior presumió otro daño al erario por 3 millones 149 mil pesos por pagos de un contrato que correspondió al ejercicio fiscal de 2017 pero que se hizo con recursos del Fondo de Aportaciones del ejercicio fiscal 2018, para la adquisición de equipo médico y de laboratorio.
También detectó otro probable daños por 7 millones 797 mil pesos, por la adquisición con recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud de artículos deportivos, concretamente de mochilas, así como para el mantenimiento de inmuebles y de productos alimenticios, de los cuales no se presentó la documentación que acredite su entrega, en incumplimiento de la Ley General de Contabilidad Gubernamental.
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