Consumir carne de cerdo puede tener efectos perjudiciales para la salud y el medioambiente

Ciudad de México.- A pesar de que la carne de cerdo es una de las más populares para el consumo humano, existen diversos factores de riesgo que no siempre se ponen en consideración y que ni los gobiernos ni organizaciones privadas ponen a disposición de los consumidores, aquí te mostraremos algunas de las desventajas de comer este tipo de carne.

De acuerdo a un artículo publicado en la revista American College of Nutrition, se encontró evidencia suficiente para ligar el consumo de carne con un elevado riesgo a adquirir Alzheimer, junto con otras enfermedades crónicas.

La carne de cerdo también está ligada al desarrollo de enfermedades cardíacas, diabetes, osteoporosis, artritis, asma, impotencia e incluso cáncer.

Los cerdos, en su mayoría, son criados bajo una dieta hormonal, lo que favorece su rápido crecimiento, mismas que el consumidor ingiere a la hora de comer esta carne, lo que puede provocar un desbalance en el organismo.

A su vez, se les aplica antibióticos, los cuales crean resistencia a la hora de ser consumidos por seres humanos, lo que está llevando a una importante crisis de resistencia bacteriana, la cual, señalan expertos, podría llegar pronto al punto de no retorno, o sea que los medicamentos a los que tenemos acceso podrían no tener efecto en las enfermedades, lo que a su vez podría tener consecuencias aún más graves en un medio-largo plazo para la humanidad.

Por si todavía no es suficiente esta información, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), señala que: ‘el principal impacto ambiental directo de la producción porcina está relacionado con los purines producidos por el ganado porcino. Un almacenamiento adecuado puede reducir la cantidad de gases de efecto invernadero liberados y la producción de combustibles a través de biodigestión puede contribuir a optimizar el uso de los recursos naturales que intervienen en el ciclo de producción’.

En 2017 la Revista Proceso publicó un reportaje sobre la crueldad contra los animales en los mataderos de México, la cual fue documentada por un fotoperiodista español.

El texto describe las inhumanas condiciones en las que no solo cerdos, sino otros animales viven en los rastros, en donde no se siguen las pautas internacionales de trato a los animales ni, en diversos casos, de higiene.

El fotoperiodista, cuyo nombre no ha sido revelado por temas de seguridad, describe además el daño psicológico que los trabajadores de los rastros sufren como consecuencia de tener que asesinar a decenas de animales todos los días:

‘Los trabajadores tienen que matar de forma sistemática a decenas o cientos de animales cada día. Muchos de ellos se resisten a la muerte. Sus miradas sólo reflejan terror. Generalmente hay una radio encendida y los trabajadores cantan o se gastan bromas entre ellos. Es un ambiente grotesco. Mientras los cerdos cuelgan, ahogándose en su propio vómito, puedes ver a un grupo de trabajadores bromeando sobre alguna anécdota del día. Tiene cierta lógica. Es una forma de evadirse.

Sin embargo, también hay quienes están muy conscientes de lo que hacen y que se les ve afectados. He conocido algunos que no son capaces de comer la carne de la especie de los animales que matan. En los mataderos de vacas varios de me han dicho que las vacas son conscientes de lo que les va a suceder. Que las han visto llorar momentos antes de morir y que son imágenes que no logran borrar de su mente’, explica el periodista en el reportaje.

También cuenta que el peor matadero que visitó se encuentra en Villa Corzo, en el estado de Chiapas, y describe la lenta y dolorosa muerte de una vaca, la cual, incluso tras intentar degollarla, se resistía a morir.

Actualmente existen cientos de opciones asequibles y sanas que permiten a la población evitar estas carnes que, además de dañinas para el cuerpo, contaminan el medio ambiente.

Imprimir artículo Síguenos en Google News

Post más visitados en los últimos 7 días