Ciudad de México.- A un año de la llegada del cardenal Carlos Aguiar Retes a la Arquidiócesis de México se han propuesto varios proyectos pastorales que, asegura, maduraran con el tiempo, pero han enfrentado resistencia para su implementación por parte de algunos sacerdotes que lo ven como un “pastor” distante.
Uno de sus primeros anuncios fue el mejorar administrativamente el servicio de las parroquias, decanatos y otras instancias eclesiales. Para lograrlo contrató una auditoria a Ernest & Young sobre las finanzas arquidiócesanas. Esta decisión fue duramente criticada por los sacerdotes, porque entendieron que se le iba a realizar una auditoria en todos templos.
Esta auditoria concluyó en junio pasado, con sus resultados el cardenal conoció la situación financiera de Arquidiócesis y los recursos con los que cuenta, sin embargo, los resultados no se hicieron públicos como se había prometido.
Otro proyecto es la creación de las Unidades Pastorales, que se han empezado a integrar con tres o cuatro sacerdotes de templos cercanos, quienes coordinarán sus esfuerzos para la evangelización y agilizar los servicios pastorales, para éste también existe resistencia por parte del clero, quienes aseguran que aún no está claro cómo se manejarán los recursos.
La decisión de que la preparación para la primera comunión sea de dos años y la confirmación de tres años, ha sido también cuestionada por muchos sacerdotes, tras asegurar que provocará se continué con el abandono los fieles a los templos, como se ha registrado en los últimos años.
La mayoría de los sacerdotes por obediencia, tratará de implementar esa medida, pero otros han manifestado un rotundo “no” para establecerla.
Otro tema es la preparación de los seminaristas en Teología quienes ya están en las parroquias y se pretende tengan cercanía con los fieles. Y quienes concluyeron Filosofía se regresen a sus casas y busquen un empleo, esta etapa se ha denominado Discernimiento Presbiterial, serán acompañados por un asesor espiritual y se espera que tengan una decisión más firme para ser ordenados sacerdotes.
Aún, está pendiente la división de la Arquidiócesis en donde se prevé crear tres diócesis Xochimilco, Iztapalapa y Azcapotzalco, propuesta que ya estudia el Vaticano.
Además, de los desafíos que implica llegar a la Arquidiócesis de México por su extensión, complejidad y por sustituir al arzobispo primado que permaneció 22 años, Aguiar Retes se ha enfrentado a una campaña de desprestigio, desarrollada por personajes identificados con su antecesor el cardenal Norberto Rivera Carrera, quienes han aprovechado las redes sociales internas de la Arquidiócesis para difundir sus mensajes. Así como de utilizar a algunos amigos en los medios de comunicación.
Los proyectos pastorales son ambiciosos y el cardenal Carlos Aguiar considera que en tres o cuatro años se verán los resultados. Por lo pronto ha sido un año en donde encendió luces para un nuevo andar en la Arquidiócesis de México, pero sus decisiones son cuestionadas y en las “sombras” se mueven sus enemigos.
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