Ciudad de México.- El Gobierno de Claudia Sheinbaum generó expectativas muy altas en la campaña electoral de 2018 y para dar muestra de un cambio radical la Jefa de Gobierno de la Capital CDMX echó mano de un gabinete de “académicos”.
Sin embargo, a casi seis meses de asumir el poder no ha logrado que ese equipo dé los resultados esperados. Al llegar a sus 100 días dijo, con el rostro desencajado, que no estaba satisfecha con sus logros en materia de seguridad y de ahí a la fecha, la situación ha empeorado al grado que se vive una crisis sin precedentes en materia de homicidios dolosos con un promedio de cinco al día.
Los primeros ajustes en su gabinete deben ser en el área encargada de la seguridad que pasa por tres instituciones: la Secretaría de Seguridad Ciudadana, que dirige Jesús Orta; la Procuraduría General de Justicia, bajo el mando de Ernestina Godoy; la Secretaría de Gobierno, que conduce Rosa Icela Rodríguez; y la coordinación del gabinete de seguridad, en manos de Tomás Pliego.
Claudia Sheinbaum ya dio muestras de que su malestar crece en ese rubro porque no hay resultados a la vista y los cuadrantes fueron mal diseñados, por lo que no se tienen avances ni una estrategia clara de combate a la delincuencia, lo cual se ha agudizado por el retraso en el aumento salarial del nueve por ciento a los uniformados.
Por ello, los primeros ajustes se centran en el gabinete de seguridad y justicia de Sheinbaum para enderezar el rumbo y ella ya puso julio como plazo para ver resultados.
No obstante, donde está cantada la primera baja en el gabinete de Sheinbaum es en el Instituto de Vivienda de la CdMx, que dirige el arquitecto Pedro Sosa.Las cosas en el Invi no andan bien porque ha sido muy lenta la actuación del perfil que impuso Sheinbaum y no ha habido buena relación con loa dirigentes de Morena que se dedican a gestionar vivienda.
Es cuestión de tiempo para que se anuncien los cambios en el gabinete capitalino y es el momento adecuado si lo que quiere Sheinbaum es que la caída de popularidad se mantenga en el margen de error y no se convierta en una espiral sin fondo.
Cambios en el Congreso CDMX
En el Congreso capitalino, donde predominan las corrientes de Ricardo Ruiz, José Luis Rodríguez y Valentina Batres, está en trámite la salida de Javier González “El Güero” Garza de la Oficialía Mayor.
El grupo parlamentario de Morena en su plenaria votó el cambio de González Garza, pese a ser arropado por Ruiz, debido a que la mayoría de los legisladores de Morena aseguran que se mueve por la libre y ha operado convenios y recursos para sus allegados sin informar a la bancada.
Como en ese grupo parlamentario no hay disciplina sino alianzas coyunturales según los intereses en puerta, al término de este periodo ordinario habrá cambios en las áreas administrativas, salvo que hagan las paces y haya un reparto del botín de forma adecuada, ya que es lo que les interesa, no legislar ni transformar la CdMx.
En caso de que se haga el relevo falta ver si Ruiz tendrá la capacidad de retener la cartera o le van a dar baje como de costumbre, ya que si no respetan a la Jefa de Gobierno, menos al coordinador de Morena aún cuando le vayan hacer creer que estará en el poder los dos años restantes.
Mano dura
Claudia Sheinbaum parece que ya entendió que el pueblo no es tan bueno como cree el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y por esa razón volvió a sacar a las calles a los granaderos.
El sábado pasado, en el Centro Histórico de la Ciudad de México desfiló un operativo de unos cien elementos con sus clásicos escudos para poner en orden a los comerciantes informales que ya se desbordaron en el perímetro A.
Los granaderos actuaron como es su costumbre y dejaron a varios ambulantes heridos en las calles de Uruguay, Regina y detrás de Palacio Nacional.
La duda es si Sheinbaum dio marcha atrás a su promesa de desaparecer a los granaderos o una vez más el alcalde de Morena en Cuauhtémoc, Néstor Núñez, se fue por la libre para apretar a los ambulantes y sentarlos en su mesa antes de que acuerden con el gobierno capitalino. Cualquiera de las dos opciones serían muy graves.
NOCAUT. El alcalde de Morena en Xochimilco, José Carlos Acosta, quedó contra las cuerdas al salir con la ocurrencia de seguir la línea prohibicionista del partido y suspender en las trajineras el consumo de alcohol. ¿Se les olvida que la CdMx es una ciudad de libertades? ¡Abrazos, no periodicazos!
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