Un turbulento Tribunal Electoral

Ciudad de México.- A la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJ) llegó una papa caliente. Morena impugnó ante el órgano electoral el acuerdo del Instituto Nacional Electoral (INE) para evitar la sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados.

Morena y sus aliados buscan, como lo hicieron en 2018, engañar al electorado al presentar como candidatos a militantes morenistas bajo las siglas del PT y del PES, para, una vez instalados en las curules, regresar a su partido de origen.

En la elección de 2018 esa estrategia le permitió a Morena tener una sobrerrepresentado en la Cámara de Diputados de 16 por ciento. Esa ocasión obtuvo una votación de 44 por ciento, pero con la trampa alcanzó el 61 por ciento.

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Pretende hacer lo mismo el 6 de junio, pero el INE, en apego a la Constitución, aprobó un acuerdo para corroborar la afiliación efectiva de los candidatos. Es decir, aquella que esté vigente al momento del registro de las candidaturas será la que se tomará en cuenta.

A Morena no le gustó la resolución del INE e impugnó ante el TEPJF para intentar revertirla. Busca nuevamente tener más diputadas y diputados que los que los votos le otorguen.

La decisión del Tribunal Electoral es de pronóstico reservado. Esa institución está partida. Además, sus determinaciones no siempre se apegan a lo jurídico, sino a intereses políticos.

Después de la última confrontación de los magistrados, en la que cinco de ellos se inconformaron con el presidente del órgano electoral, José Luis Vargas, en una disputa con el Consejo de la Judicatura Federal, la dirección del Tribunal es incierta.

Hay tres bloques: uno, conformado por Janine Otálora, Reyes Rodríguez e Indalfer Infante; otro, integrado por Felipe Fuentes Barrera y Felipe de la Mata, y el tercero el del propio Vargas y Mónica Soto.

Parece que Fuentes Barrera y De la Mata se divorciaron de Vargas con quien votaban en bloque y aprobaron juicios que beneficiaron al gobierno y a Morena.

Ante la división de la Sala Superior, es impredecible cómo resolverán la impugnación de Morena, la cual seguramente llegará con una recomendación de Palacio Nacional.

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