Ciudad de México.- Con el fin de definir la labor de las fuerzas armadas en el país, el Congreso de la Unión inició con un debate público entorno a la Seguridad Interior. Sin embargo, mientras el argumento del Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha sido que continúen en las calles ante la falta de preparación de los policías estatales, el de la Revolución Democrática (PRD) se ha pronunciado porque regresen a los cuarteles.
Las discusiones sobre la participación de la Secretaría de Marina, Defensa Nacional, el Consejo Nacional de Seguridad y la Policía Federal generarán más debate debido a que, por ejemplo, desde Acción Nacional (PAN), el senador Roberto Gil Zuarth comentó que su presencia propicia que no se capacite a los policías.
En esta primera reunión, el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Pablo Escudero precisó que solo se darían a conocer las iniciativas para luego dar paso a una reunión privada en la que acordarán los mecanismos con los que trabajarán.
Una vez establecido el calendario de “audiencias públicas o reuniones de trabajo”, especialistas, sociedad civil y expertos en la materia se unirán a los senadores para expresar su opinión sobre las propuestas de estos tres partidos.
El tema comenzó a revisarse desde el 18 de octubre pasado, cuando el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, acudió a un acto público en el que aseguró “hay un desgaste en el ejército por las tareas que le han encomendado”, por lo que puso de manifiesto la necesidad de más elementos.
Durante su participación en el inicio de los trabajos, el consejero jurídico de la presidencia, Humberto Castillejos informó que no se ha legislado en la materia desde la aprobación de la Constitución Federal en 1917, motivo por el que aplaudió la presentación de propuestas.
Gil Zuarth destacó que se necesita un promedio de 65 mil policías en todo el país para realizar las labores que actualmente llevan a cabo las Fuerzas Armadas, mientras que actualmente solo hay 48 mil en funciones.
Desde el sol azteca, el senador Miguel Barbosa fue el promovente de la iniciativa en la que además de sacar de las calles en seis meses a los uniformados, apunta que movimientos sociales y conflictos electorales no deberán considerarse “bajo ninguna circunstancia” como una amenaza para la seguridad interior.
César Camacho del PRI, aseveró “sí, es indispensable una ley para las fuerzas armadas, pero lo es tanto o más para los ciudadanos”, y agregó se deben marcar espacios físicos y temporales con la nueva ley.
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